La "fábrica" de los profesionales del mañana

En 1990, por estas fechas de finales de mayo, unos 4.000 zamoranos asaltaban las instalaciones abandonadas del Cuartel Viriato para exigir que el recinto se convirtiera en un campus adscrito a la Universidad de Salamanca. Un espacio moderno, con titulaciones adaptadas a las necesidades el mercado laboral, para que sus hijos no tuvieran que irse a estudiar y buscarse un porvenir lejos de su tierra.

33 años después son ya muchas las generaciones de estudiantes de Zamora y de otras provincias que se han formado en el Campus Viriato y trabajan la empresa privada, en instituciones de investigación o como emprendedores.

Uno de los últimos egresados del Grado en Ingeniería de Materiales es José Carlos Rebollo, graduado en 2022, que ha podido satisfacer su vocación investigadora en el propio Campus Viriato.

José Carlos, de 22 años de edad, tras graduarse en Ingeniería de Materiales, ha firmado un contrato con la Universidad de Salamanca, gracias a un convenio con el Servicio Público de Empleo de Castilla y León (SEPE), para investigar el reciclaje de distintos materiales. Un tema que es de su interés porque "busca soluciones reales a una problemática que está ahí y a la que urge dar respuestas".

Su intención es permanecer unos años más en el Campus Viriato para especializarse con un Doctorado en este tema. "Cuando empecé la carrera no me imaginaba trabajando de lo que yo quiero y tan cerca de casa", confiesa José Carlos, que procede de un pueblo de Salamanca y llegó a Zamora hace cinco años para estudiar la ingeniería que le gustaba.

La cercanía a su casa fue lo que animó al zamorano Roberto Galende Bernardo a decantarse por el Grado en Ingeniería Agroalimentaria una vez que terminó Bachillerato. Se graduó en 2022 y cree que elegir esa carrera fue una de las mejores decisiones de su vida porque "es una Ingeniería muy bonita, ya que estás todos los días en el laboratorio". Este alumno egresado señala la calidad de los laboratorios de Agroalimentaria en el Campus Viriato. "A partir del segundo año tienes trabajos de laboratorio en todas las asignaturas, y en cuarto haces experimentos muy interesantes con alimentos". Los ingenieros agroalimentarios controlan y mejoran la calidad de los procesos de elaboración de los alimentos, desde su cultivo o cría, hasta que llegan al lineal del supermercado. Roberto destaca también que tuvo la oportunidad de hacer prácticas en una gran empresa del sector en Zamora, como es Lactalis. Ahora ha descubierto su vocación docente y se prepara para el Máster en Profesorado.