La huelga de funcionarios de Justicia continúa este miércoles y jueves en Zamora

Los empleados públicos vuelven a concentrarse a primera hora de la mañana ante la Audiencia Provincial

Huelga a la puerta de Los Momos este 10 de mayo.

Huelga a la puerta de Los Momos este 10 de mayo. / José Luis Fernández

Los ciudadanos se encontrarán de nuevo este miércoles con los juzgados cerrados al continuar la huelga que ayer siguió la práctica totalidad de la plantilla del Ministerio de Justicia en Zamora, en concreto, el 95% del personal de todos los juzgados de la capital y provincia, según los datos de los sindicatos.

Las salas de vistas volverán a permanecer sin actividad al no disponer de personal de auxilio para desarrollar los juicios que estuvieran fijados en todos los juzgados, salvo aquellos relativos a violencia de género o cuyo acusado esté en la cárcel en prisión preventiva por el delito que se le impute.

Un momento del acto de funcionarios frente a los Momos.

Un momento del acto de funcionarios frente a los Momos. / José Luis Fernández

Los trámites o comunicaciones de autos tampoco podrán realizarse, ni notificarse ninguna decisión del juez, ni sentencias ni otro tipo de resoluciones, así como las comparecencias u otras actividades que se desarrollen en las oficinas judiciales, ya que ni auxilios, ni tramitadores ni gestores acudirán al trabajo salvo para realizar los servicios mínimos relacionados con los delitos ya mencionados. El paro durante toda la jornada laboral tendrá continuidad mañana, día 11 de mayo.

Hoy, nueva concentración

Está previsto que los huelguistas vuelvan a concentrarse a las 10.00 horas ante la Audiencia de Zamora como vienen haciendo durante las horas y días de paro. En la mañana de ayer la convocatoria concentró a más medio centenar de funcionarios de los juzgados se concentraba a las puertas de la Audiencia.

Concentración hoy, miércoles 10 de mayo.

Concentración hoy, miércoles 10 de mayo. / José Luis Fernandez

Los empleados públicos se sienten discriminados en la trato por el Ministerio y continúan pidiendo la dimisión de su responsable máxima, Pilar Llop, por ignorar sus reivindicaciones. Los funcionarios zamoranos mostraron ayer su hartazgo e indignación por el escaso reconocimiento de Justicia a las tareas que desarrollan en las oficinas de civil, penal, del Juzgado Contencioso, de Menores y los de Social. Los empleados públicos aseguran que "muchas funciones que realizamos corresponderían a los letrados de la Administración de Justicia", los LAJ’s, que han visto aumentada su remuneración tras la huelga continuada de más de dos meses.

Incremento salarial e igual trato del Ministerio

Las plantillas de los órganos judiciales exigen, por tanto, un incremento salarial de entre 350 y 430 euros al mes para que sus remuneraciones se ajusten a las responsabilidades que asumen durante su jornada laboral, un trabajo sin el que la Justicia se paralizaría, manifiestan. El viernes volverán a sus puestos de trabajo para volver a secundar el paro continuado los días 16,17 y 18 de mayo, convocados por los sindicatos CC OO, UGT, CSIF y STAJ.

La huelga se prolongará hasta que el Ministerio acceda a sus pretensiones. Los funcionarios vuelven a recriminar que se esté haciendo oídos sordos a sus reivindicaciones mientras que los jueces y las juezas han logrado sus objetivos en tiempo récord, una subida salarial que ha repercutido también en los fiscales y fiscalas y que ahora reclaman los LAJ.

El amplio seguimiento de la huelga se valoraba ayer muy positivamente, lo que ha sido posible después de que el Ministerio redujera los servicios mínimos impuestos en los primeros paros parciales que calificaron como "servicios máximos", protestas que surtieron efecto.

La incorporación a las movilizaciones del personal interino que ocupa las plazas de auxilio -los empleados públicos que están presentes en las salas de juicios para realizar las grabaciones e ir llamando a imputados, víctimas y testigos- permitió dar un impulso a los paros y a la huelga general convocada para martes, miércoles y jueves de estas últimas semanas.

Inicialmente, ese personal tenía más difícil sumarse a estas acciones de presión lo que mermó el porcentaje de seguimiento en esas primeras convocatorias, dado el número muy significativo de la plantilla al no cubrirse las vacantes que se vienen dado, explicaban desde los sindicatos para subrayar que podían sentirse presionados al no ser funcionarios.