El colectivo ucraniano merma en Zamora tras un año de desplazamiento

Los varones son reclutados para combatir y buena parte de las refugiadas busca rehacer su vida en la costa

Reunión de coordinación sobre la situación de los refugiados.

Reunión de coordinación sobre la situación de los refugiados. / Ana Burrieza

Luis Garrido

Luis Garrido

El número de desplazados ucranianos que residen en la provincia de Zamora disminuye paulatinamente a medida que se dilata la guerra que enfrenta a su país con Rusia. A fecha actual, cuando se ha cumplido un año del estallido del conflicto bélico, existen en este territorio 155 refugiados, frente a los 171 que había hace apenas seis meses. La mayoría de ellas son mujeres; no en vano, actualmente tan solo hay nueve hombres repartidos entre las distintas localidades de acogida. Esto encuentra explicación en dos vertientes. La primera es que, de entrada, vinieron menos varones por ser inicialmente reclutados para combatir; y, la segunda, es que ha habido hombres que, estando ya en España, han sido reclutados y han tenido que regresar.

El subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, ha presidido este jueves la reunión provincial de coordinación, seguimiento y recepción de desplazados ucranianos. La cita se ha celebrado cuando se cumple un año del inicio del conflicto y ha servido para hacer balance de las actuaciones y de la situación actual de este colectivo. En el encuentro han participado la secretaria general de la Subdelegación, Francisca Turiel; el jefe de la Brigada Provincial de Extranjería, Gustavo García; el teniente coronel de la Guardia Civil, Héctor Pulido; la directora provincial del INSS, Teresa Peral; la concejala de Bienestar Social, Inmaculada Lucas.

También han estado presentes representantes de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León y de la Diputación Provincial de Zamora; la coordinadora provincial de Cruz Roja, Silvia Montalvo; la responsable del Programa de Inmigrantes de Cáritas Zamora, Isabel Sampedro; Beatriz Riesco, encargada de Cooperación Internacional de Cáritas Zamora; Isidro Lozano, de ADIF-AV Zamora; representantes de la estación de autobuses de Zamora; el responsable de Protección Civil de la Subdelegación, Alberto González; el jefe de la Oficina de Extranjería, Miguel García; y Ángela Pérez González, de la Fiscalía de Menores.

Blanco ha sido el encargado de ofrecer los datos y valorar la situación del colectivo, del que ha destacado su integración en la provincia de Zamora. Al respecto, ha señalado que 51 personas con pasaporte ucraniano están dados de alta en los registros de la Tesorería de la Seguridad Social, de los que 33 se encuentran adscritos al régimen general, nueve al régimen agrícola y siete a autónomos. No obstante, el grueso de la población son menores de edad, hasta 107, que también han tenido una buena incorporación a los servicios educativos.

El subdelegado ha ensalzado el trabajo realizado por Cruz Roja Española, que gestiona la estancia de 33 personas en el conjunto de la provincia, así como de Cáritas Diocesana, que ha realizado acompañamiento integral a 60 personas. También ha destacado la colaboración de organizaciones como Acoge Ucrania o Acción Norte. También ha insistido en que la población de este país llegada a Zamora “no ha generado ningún conflicto y, en general, han tenido una buena convivencia”.

Zamora ha sido desde el inicio un lugar de paso para los refugiados ucranianos. “Hay muchas personas que han venido aquí que quieren marcharse a lugares de costa”, ha señalado Ángel Blanco. “Además, buena parte de los ucranianos están muy formados y por eso quieren dejar el medio rural y mudarse a la ciudad, entendiendo que ahí van a tener más oportunidades laborales”, ha ahondado el subdelegado del Gobierno en Zamora.