Casi 2.000 zamoranos podrían sufrir la llamada "ceguera silenciosa" sin saberlo

Cerca de 2.000 zamoranos podrían tener glaucoma sin saberlo. Esa es la estimación que realiza la asociación de afectados por la enfermedad y sus familiares, que considera que en torno al 50% de las personas que padece este problema desconoce el diagnóstico real. El glaucoma es un grupo de enfermedades oculares que provoca un daño progresivo e irreversible en el nervio óptico y se caracteriza por la pérdida de visión periférica.

"Dentro de un túnel"

En concreto, el glaucoma hace que las personas vean como si estuviesen «dentro de un túnel», según el colectivo de afectados, que explica que «en ese momento es cuando la gente decide acudir al médico y recibe el diagnóstico». Para la asociación, en esta etapa de la enfermedad «ya es demasiado tarde» y es por eso que consideran muy preocupante que el 76% de los pacientes con esta patología oftalmológica afirme haber perdido mucha visión.

Así las cosas, con motivo de la semana del glaucoma que se celebra del 12 al 19 de marzo, la asociación quiso destacar la importancia de un diagnóstico precoz que se lograría si las personas se realizasen una revisión ocular de forma periódica, sobre todo a partir de los 45 años que es cuando esta «ceguera silenciosa» presenta su mayor incidencia.

Los datos que se manejan de esta enfermedad ocular no son nada halagüeños y se calcula que afecta aproximadamente a 52.200 personas en la comunidad. El estadio asintomático es lo que provoca el desconocimiento inicial, «pero el nervio óptico se va degenerando poco a poco y roba visión».

«El glaucoma, cuanto antes se empiece a tratar, mejor porque con los tratamientos no se recupera la visión que ya se ha perdido, pero sí se frena su avance y se evita la ceguera total en la mayor parte de los casos”, destacó Joaquín Carratalá, el presidente de AGAF, nombre que recibe la asociación de afectados y familiares.

Un deterioro de la vida

Por este motivo, el colectivo realizó una encuesta a nivel nacional entre pacientes que padecen esta enfermedad en la que se refleja el impacto que tiene esta patología ocular no sólo en el ámbito físico, sino también en el psicológico de las personas: un deterioro en la vida cotidiana y en el día a día del 97% de los pacientes.

«El glaucoma a día de hoy no tiene cura, pero existen colirios y medicamentos destinados a frenar esa tendencia hacia la ceguera total. Sin embargo, la adherencia al tratamiento suele ser bastante baja y es por ello que la enfermedad continúa como una de las principales causas de ceguera evitable en el mundo», según este colectivo, empeñado en concienciar de la gravedad de un problema que, en total, podría golpear a 4.000 personas en toda la provincia.