Agresión sexual en Zamora | Piden 10 años de cárcel por violar a una joven con discapacidad durante medio año

La última vez que la joven con discapacidad del 67% e inteligencia límite habría sufrido una violación había salido de su casa para pasear al perro el 11 de noviembre de 2017. La presunta víctima, cuyo abogado exige una condena a 10 años de cárcel por un delito continuado de violación, sostiene que no era la primera vez que el imputado, que fue compañero de colegio e instituto de la denunciante, había agredido sexualmente a la joven, lo había hecho cuando eran niños, en el año 2011.

En esa ocasión, habría fingido acompañarla a su casa para desviarla a una tierra, subirla a un remolque, atarle las manos y amordazarla para impedir que gritara antes de tocarle los pechos y penetrarla. La preadolescente nunca contó nada, aunque sufrió tal shock que tuvo que permanecer ingresada en un hospital de Valladolid, tras un cambio en su comportamiento y de su personalidad, más retraída.

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Su vuelta al pueblo seis años después de esa traumática experiencia volvió a dejarla a merced del procesado, de iniciales A.J.E., quien la habría violador entre abril y el 11 de noviembre de 2017. Ese día, el imputado le había hablado por WhatsApp ya a las ocho de la mañana para proponerle quedar porque “necesito un abrazo”; “¿quieres quedar para hablar?” “o si quieres ver una peli”, decían los mensajes interceptados en la investigación.

La presunta víctima no le respondió hasta pasadas las tres de la tarde para preguntarle si iba a salir y, hacia las 17.30 horas, el encausado insistió para invitarle a su casa porque “hace mucho frío para salir”. Cuando ella le pregunta “¿para?” qué, casa A.J.E. le contesta que “para hablar y escuchar música”.

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Una vez en el domicilio del varón, la joven relató que charlaron un poco y él le pidió que se quitara la sudadera y comenzó a abusar de ella, para después darle a elegir entre hacerle una felación o la penetración anal, recoge el escrito de la acusación particular que describe que también lo hizo por vía vaginal a pesar de que ella se niegaría, le indicaría que se le hacía tarde y su padre se preocuparía. El joven, siempre según la versión de la joven, le impidió coger su teléfono móvil para contestar a las llamadas de su padre, a quien contó lo ocurrido al llegar a casa.

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