Ilusión con buen sabor de boca en Zamora

Mientras los niños disfrutan de los regalos, los mayores se endulzan el Día de Reyes con el tradicional roscón

Dos niñas abren sus regalos el día de Reyes, junto al árbol de Navidad. | Cedida

Dos niñas abren sus regalos el día de Reyes, junto al árbol de Navidad. | Cedida / B. Blanco García

Beatriz Blanco García

Beatriz Blanco García

Los niños zamoranos no tuvieron ayer ningún problema para madrugar, muchos apenas pudieron pegar ojo por los nervios y algunos incluso aseguraron haber visto tres sombras y escuchado pasos durante la noche en sus casas.

Dos hermanas juegan con su nueva casa de muñecas. | Cedida

Dos hermanas juegan con su nueva casa de muñecas. / Cedida

Todos ellos se dedicaron la mañana del viernes a desenvolver la multitud de regalos que había en sus salones, gracias a la generosidad de los Reyes Magos. Melchor, Gaspar y Baltasar volvieron a adivinar —un año más— sus deseos y descubrieron aquella cocinita de sus sueños, el último videojuego para su consola, la bicicleta con la que aprenderán a hacer carreras, la muñeca que era tan complicado conseguir o ese juego de mesa con el que pasarán largas tardes divirtiéndose en familia. Una familia que disfrutó más incluso que ellos al ver la ilusión con la que termina esta Navidad.

Varios niños de Andavías muestran los juguetes que les han traído Melchor, Gaspar y Baltasar. | Emilio Fraile

Varios niños de Andavías muestran los juguetes que les han traído Melchor, Gaspar y Baltasar. / Emilio Fraile

No era misión de los Reyes Magos, pero sí de los padres, el aprovisionarse con un roscón de reyes para endulzar estos últimos días de fiesta. Desde el jueves, este cometido se volvió para algunos una misión casi imposible, solventada, en muchas ocasiones, tras recorrer varias pastelerías de la ciudad y esperar pacientemente entre la niebla zamorana su turno. Nata, crema e incluso trufa, además del tradicional sin relleno, eran las variadas opciones con las que contaban. Para todos los gustos y para disfrutar en buena compañía, el roscón de reyes se convierte así en la última tradición de las navidades.

Uno de los roscones de reyes, preparado para irse a un hogar zamorano. | Jose Luis Fernández

Uno de los roscones de reyes, preparado para irse a un hogar zamorano. / Jose Luis Fernández