La energía solar será una realidad en el Campus Viriato de Zamora para el curso 2023-2024

Mejorar la eficiencia del uso de la energía en la USAL, lograr una universidad sostenible y garantizar un máximo ahorro económico para disponer de sus fondos y recursos para cuestiones académicas son las tres razones principales por las que el rectorado ha lanzado una convocatoria para la instalación de paneles fotovoltaicos en una docena de edificios de la USAL, diez de ellos en Salamanca y dos más en el Campus Viriato de Zamora. Concretamente, el montaje de estas placas se hará en el edificio de piedra y en el pabellón polideportivo, “que tiene una cubierta con una orientación muy óptima y que no planteará ningún conflicto”, señala el director del proyecto, Pedro Calero, profesor de Economía Aplicada.

Y es que este plan descarta aquellos edificios que puedan estar cercanos a lugares de patrimonio o que ellos mismos —como es el caso de los que albergan la Escuela de Magisterio o la Politécnica— sean arquitectónicamente singulares.

Publicación del anuncio de contratación

Esta misma semana, el Boletín Oficial de Castilla y León publicaba el anuncio de contratación pública para que las empresas interesadas puedan presentar sus propuestas. La USAL pretende invertir algo más de 3,5 millones de euros en unas instalaciones en Zamora y Salamanca que tendrán una potencia no inferior a los dos megavatios y que calculan que aportarán hasta el 25% de las necesidades eléctricas de los edificios en los que se instalen.

Las empresas interesadas tendrán hasta el próximo 13 de enero para presentar su oferta de contratación de energía fotovoltaica en régimen de autoconsumo con excedentes, mediante concesión demanial en las cubiertas de edificios de la Universidad de Salamanca. El plazo de ejecución es de 24 meses y de ahí que Calero calcule que la energía solar en el Campus Viriato de Zamora podría ser una realidad a finales del curso 2023-2024.

“Tras el cierre del plazo de admisión de ofertas, comenzará el proceso administrativo de adjudicación, análisis de las ofertas y su puntuación, por lo que, seguramente, a finales de enero o principios de febrero se publicará la mejor oferta y uno de los aspectos que se tendrán en cuenta será la reducción de tiempos en la ejecución”, advierte. “Cuanto antes se ponga en marcha, antes se verán los beneficios, tanto para la universidad como para la sociedad”, considera el director del proyecto.

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Alternativa a la energía eléctrica

El uso de esta energía será el tradicional. “Lo que hará será suministrar la energía eléctrica que habitualmente consumen estos edificios en aulas, despachos, biblioteca o laboratorios”, explica el director del proyecto. “Cuando haya disponibilidad del recurso, se sacará menos de la red. En las características del suministro y la disponibilidad no hay diferencia, los usuarios no van a notar ningún cambio. Y seguramente en meses como mayo o junio la cantidad que se autoconsumirá será mayor que en esta época, porque habrá más recurso”, añade.

Sobre las ventajas que acarreará esta instalación de placas solares en el campus zamorano, Calero señala, en primer lugar, el aprovisionamiento de energía “absolutamente renovable, que disminuirá la huella de carbono y el impacto ecológico”. Además, enumera que, al tratarse de un proyecto de autoconsumo, “por un lado, se dejará de obtener energía de otras fuentes que vendrían por la red y, por otro, en término de impacto ambiental, se reducirá la necesidad de infraestructuras, porque esta energía no viaja por las redes de transporte y distribución, sino que es autoconsumida, en el mismo punto donde se genera, se consume, con la consecuente reducción de impactos”, detalla.

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Útil para las prácticas

El profesor Pedro Calero apunta a que, aparte de todas las ventajas económicas y energéticas que se deriven de las placas solares, esta instalación podrá ser aprovechada por los alumnos de la Escuela Politécnica Superior para ver en la práctica su funcionamiento. “Se trata de una utilidad importante, aparte del beneficio ambiental, económico y de sostenibilidad”, reconoce el profesor de Economía Aplicada. “Los alumnos de ingeniería podrán ver una demostración de este tipo de instalaciones, que serán visitables, para que observen el aprovechamiento de fuentes alternativas”, subraya.

A las dos instalaciones que se ubicarán en sendos edificios del Campus Viriato, el proyecto de la Universidad de Salamanca prevé instalar paneles en varias facultades del Campus Unamuno, como Derecho, Fisioterapia, Farmacia, junto al edificio FES, los colegios mayores Oviedo y Bartolomé, la biblioteca Francisco de Vitoria y el pabellón Unamuno. También habrá paneles en la facultad de Educación del paseo de Canalejas y en el Campus Ciudad Jardín donde se estudia Bellas Artes y Psicología.

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