Zamora, en alerta por viento fuerte que alcanzará 70 kilómetros hora

Prácticamente toda la provincia de Zamora (salvo la Alta Sanabria) se encuentra durante este lunes en alerta amarilla por la posibilidad de vientos fuertes, que pueden llegar a alcanzar velocidades de 70 kilómetros por hora. La Agencia Estatal de Meteorología mantenía este aviso desde este lunes a las 10.00 horas hasta el mismo día a las 18.00 horas, por lo que fuera de este periodo la situación tenderá a mejorar.

Las lluvias serán el otro elemento protagonista de la climatología en la provincia, ya que se espera que caigan durante toda la jornada, aunque habrá una tregua a partir de última hora de la tarde para volver a reproducirse durante el martes. No hay ningún tipo de alerta por lluvias, por lo que en principio pueden caer de forma abundante, pero no de modo extraordinario con la posible provocación de daños.

Las temperaturas permanecerán suaves, con mínima de ocho grados en la capital zamorana este lunes y máxima de 15 grados, mientras que el martes se prevé una madrugada más agradable, con 12 grados de mínima aunque por el día los termómetros no superarán los 15 de la jornada anterior.

La cota de nieve se mantiene en altitudes elevadas, por encima de los dos mil metros.

Lo que está ocurriendo es que hay una potente borrasca en el océano Atlántico, denominada Efraín, por los portugueses. Y esta borrasca, indica la Agencia Estatal de Meteorología, está impulsando una corriente de aire muy cargada de humedad desde prácticamente el Caribe hasta la Península Ibérica, lo que en términos técnicos se domina Río Atmosférico.

Río Atmosférico

Los Ríos Atmosféricos (conocidos por sus siglas, RA, o AR en inglés, Atmospheric Rivers) son regiones relativamente estrechas en la atmósfera que son responsables de la mayor parte del transporte horizontal de vapor de agua fuera de los trópicos.

Aunque los Ríos Atmosféricos pueden tener diferentes formas y tamaños, aquellos que contienen las mayores cantidades de vapor de agua, los vientos más fuertes, e impactan sobre cuencas vulnerables a las riadas, pueden crear lluvias e inundaciones extremas, causando a veces daños catastróficos.

Sin embargo, no todas los RA causan daños, la mayoría son débiles, y sólo proporcionan lluvia o nieve beneficiosas y cruciales para el abastecimiento de agua.

Es lo que se espera precisamente que suceda en España, que lleguen abundantes lluvias con temperaturas relativamente altas para esta época del año, lo que vendrá bien tras el prolongado periodo de sequía que se ha producido en gran parte del país.