La artista Lucía Loren ha presentado una escultura de madera que sirve como refugio para las abejas solitarias y se puede encontrar junto al estanque de Valorio. La obra está realizada con el tronco caído de uno de los pinos del propio bosque hace tan solo unos días.

Se trata de una pieza escultórica que conforma un hábitat para incentivar el establecimiento de abejas solitarias en este entorno, de manera paralela a la conservación y siembra de especies florales asociadas. Las abejas solitarias, en general, no tienen un reparto de tareas, todas las hembras son fértiles y construyen los nidos para sus larvas utilizando aberturas en madera vieja, huecos de juncos o ramas, o en túneles en el suelo.