Mayte Martín Pozo anunció este viernes su dimisión como concejala en el Ayuntamiento de Zamora, donde ejercía como portavoz del grupo popular. La cabeza de cartel del PP en 2019 se marcha a falta de seis meses para que concluya el mandato y deja vía libre a los responsables del nuevo proyecto del partido en la ciudad. Lo previsible es que quien fue número dos de su candidatura, Jesús María Prada, asuma el mando en las tareas de oposición para preparar el terreno como próximo aspirante de la organización a la Alcaldía de la capital en mayo de 2023.
La salida de Martín Pozo llevaba un tiempo barruntándose y se escenificó este viernes con una rueda de prensa que tuvo lugar en la sede del partido en la ciudad. El presidente del PP en la provincia, José María Barrios, acompañó a la concejala saliente en una comparecencia en la que ambos justificaron la decisión con referencias a las nuevas ocupaciones de la ya exportavoz municipal. A nadie se le escapa que las razones de interés político superan con creces a cualquier otro argumento que se haya utilizado como disculpa.
Los motivos esgrimidos
En todo caso, Martín Pozo indicó que su participación en la ponencia del Senado sobre bebés robados provocará que deba pasar más tiempo en Madrid a partir de ahora. Hay que recordar que la política popular ha compaginado durante estos años su cargo como concejala con un escaño en la Cámara Alta que mantendrá en la nueva etapa. Además, Barrios anunció que la exportavoz será la nueva coordinadora de la oficina parlamentaria del PP de Zamora, un puesto vacante hasta ahora.
Más allá de estas cuestiones, Martín Pozo habló de “punto y aparte en la política local” para ella después de siete años y medio en primera línea del escenario zamorano. Su gran salto se produjo en 2015, cuando aterrizó casi por sorpresa en la presidencia de la Diputación después de la marcha de Fernando Martínez-Maíllo a Madrid. Cuatro años después, se presentó como cabeza de lista a las elecciones de la capital, donde obtuvo el peor resultado de la historia del partido en Zamora.
“Se me pidió encabezar la candidatura del Ayuntamiento”
“Se me pidió encabezar la candidatura del Ayuntamiento”, deslizó este viernes Martín Pozo, que defendió su posición como mujer de partido al pasar de la comodidad de La Encarnación a una batalla incierta por recuperar la Alcaldía que tuvo un mal desenlace para los intereses del partido. El PP obtuvo seis concejales; Izquierda Unida, catorce y mayoría absoluta.
El balance de estos años
A partir de entonces, Martín Pozo se encargó de liderar una tarea de oposición muchas veces ingrata, pero que, según ella misma, ha sido “responsable”. “Se ha visto a un PP serio, que ha criticado las muchas cosas que hace mal el alcalde”, señaló la concejala saliente, que recordó también las dificultades causadas por una pandemia que condujo al trabajo telemático y a una reducción drástica del contacto directo.
Martín Pozo aprovechó la ocasión para agradecer el respaldo de los 24 compañeros que se unieron a ella en 2019 para dar forma a la candidatura del PP y reveló que, antes de anunciar públicamente su marcha, la había compartido con ellos y también con el alcalde, Francisco Guarido. “Lo mejor es que dé un paso a un lado y que quien tome las riendas lo haga sin hipotecas ni sospechas”, concluyó la senadora. Su marcha abre las puertas del Ayuntamiento a Ángel Herrero, que tomará posesión como concejal antes de final de año.
Para finalizar, Barrios quiso reivindicar el aguante de su compañera hasta el último momento: “Nosotros no ganamos las elecciones, pero Mayte se quedó mientras otros salían corriendo”, zanjó el líder popular, con un dardo al PSOE.
Barrios afirma que las listas para mayo “avanzan a buen ritmo”
El presidente del PP de Zamora, José María Barrios, evitó dar una fecha concreta para el nombramiento oficial de Jesús María Prada como candidato a la Alcaldía de la capital, pero sí dejó claro que la confección de las listas en la provincia “avanza a buen ritmo”, incluso mejor de lo esperado en las filas populares. “La gente tenía prisa y ya hemos empezado a hablar”, aseguró el mandatario, que confió en que haya papeletas con las siglas del partido en los 248 municipios.
Además, Barrios aclaró que la idea es llegar a todos los ayuntamientos con candidatos que tengan posibilidades, sin los habituales paracaidistas que se utilizan en determinados pueblos para rellenar las listas sin que los aspirantes tengan relación alguna con el municipio. “Esperemos tenerlo todo cerrado antes de Semana Santa”, confirmó el presidente del PP de Zamora.
El objetivo de los populares no es ya ser la primera fuerza en la provincia, sino recuperar la mayoría absoluta en la Diputación y las principales alcaldías, unas plazas que perdieron en 2015 y que no lograron reconquistar en 2019.
