Los restos de un cohete chino han condicionado durante horas el tráfico aéreo en varios puntos de España. Zamora que se encontraba en la trayectoria prevista, paralizó su espacio aéreo esta mañana. El artefacto impactó en el Pacífico sur, según ha informado el Ejército de los Estados Unidos
El riesgo de que cayeran piezas del cohete en el espacio aéreo, obligó, por precaución, a paralizar la actividad en distintos aeropuertos españoles, viendo condicionado el tráfico aéreo en varios puntos de España, incluida Zamora. La provincia es una zona en la que se encuentran varias autopistas aéreas, teniendo un trafico diario de entorno a 200 aviones.
Esta mañana se estableció Rate Cero (nombre que le da la oficina aérea de seguridad europea a las situación en las que ningún avión puede salir del aeropuerto de origen a los destinos afectados) para determinadas zonas de espacio aéreo español y ello puede afectar al tráfico aéreo en forma de retrasos en tierra y desvíos de ruta en vuelo.
La órbita del artefacto, con una estructura de 21 toneladas métricas, es errática y caótica. A pesar de que buena parte del cohete se desintegró en la atmósfera, los trozos de chatarra impactaron en el Pacífico sur, sin que se tengan que lamentar daños. Los restos del cohete sobrevolaron la península ibérica aproximadamente una hora.
La interrupción del tráfico aéreo durante esa hora de incertidumbre provocó demoras durante toda la jornada, dejando zonas inoperativas, lo que a la postre provocó cambios en las rutas de algunos vuelos y retrasos en varios aeropuertos.
El Long March 5B despegó del Centro de Lanzamiento Espacial Wenchang, en Hainan, el lunes 31 de octubre: su objetivo fue entregar el tercer y último módulo, denominado Mengtian, a la estación espacial Tiangong de China. Esto convierte a la nación asiática en el único país que actualmente opera su propia estación orbital de forma completamente independiente.
En los últimos años, el progreso de China en el espacio es más que evidente, convirtiéndose en una verdadera potencia espacial global: los planes de la agencia espacial china hacia el futuro, por ejemplo en Marte y la Luna, no tienen nada que envidiarles a los que plantea la NASA.
