Desde Nueva York hasta Zamora. Ese fue el periplo que en el año 1926 efectuó la fotógrafa Ruth Matilda Anderson por encargo de la Hispanic Society of New York.
Casi un siglo después una pequeña parte del fondo de la sección de Zamora ha realizado el mismo viaje. Ha abandonado las orillas del Hudson para recalar en las del río Duero y materializarse en la exposición “En el viejo mundo. La expedición fotográfica de Ruth M. Anderson a Zamora (1926)”, abierta hasta enero en la sala de exposiciones del Museo Etnográfico de Castilla y León.
La muestra representa la primera oportunidad de contemplar casi un centenar de las 650 imágenes que tomó la intrépida fotógrafa y su ayudante durante su estancia por tierra zamoranas y permite, sobre todo, conectar con el pasado de la ciudad y de la provincia, reconocer rincones y tradiciones y reconocerse en las gentes que inmortalizó la profesional norteamericana.
Las instantáneas diseminadas por la sala de exposiciones del Etnográfico tienen un marcado carácter etnográfico, histórico y hasta estético y recogen desde indumentaria, costumbres hasta tradiciones de la capital y la provincia.
“En el viejo mundo. La expedición fotográfica de Ruth M. Anderson a Zamora (1926)” ve la luz tras dos años y medio de colaboración entre los dos comisarios, Alberto Martín y Patrick Lenaghan, y gracias a la cooperación institucional zamorana, ya que en el proyecto van de la mano el Ayuntamiento de Zamora y la Diputación con la colaboración de la Junta, que cede el espacio expositivo.
La realización de la exposición era un anhelo de Patrick Lenaghan, quien dirige la sección de Estampas y Fotografías de la Hispanic Society of America de Nueva York. Este doctor en Arte indicó que cuando comenzó a trabajar en la institución hace más de 25 años “descubrí las fotos del auto de Villalcampo y me di cuenta de que en la sección de Zamora había tesoros”.
“Esta muestra es estar en la Champion League a nivel expositivo” aseguró en la inauguración el director del Etnográfico, Pepe Calvo, anfitrión de la actividad, mientras que el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, señaló que la exposición “en sí misma es una obra de arte”. “Impresiona en cuanto comienzas a verla y ves esas fotografías inéditas de Zamora con calles que han cambiado a lo largo de las décadas y los pueblos con esa tradición que supieron retratar dos mujeres”, comentó.
Colaboración institucional
El político, en presencia de representantes de la corporación municipal, también enfatizó el carácter feminista que encierra el trabajo, ya que Anderson viajó con su ayudante, Frances Spalding, en coche por la provincia. “Eran mujeres valientes que abrieron camino a otras en el plano del arte”. A mayores, añadió que “esa foto fija del año 1926 nos ayuda a ver cómo han evolucionado algunas cosas y cómo algunas permanecen casi igual” y aseguró que con el hecho de que eventos culturales de altura sean patrocinados por la Diputación y el Ayuntamiento “se demuestra que no hay color político, sino color cultural”.
Por su parte el diputado de Cultura, Jesús María Prada Saavedra, remarcó que este proyecto cultural es conjunto, pues “entendíamos que había que ir de la mano” y animó a todos los zamoranos a acercarse hasta el Museo Etnográfico de Castilla y León a visitarla. “Van a descubrir una Zamora y unos pueblos hasta ahora desconocidos y pasarán un rato de entretenimiento intentado reconocer partes de la ciudad”. “Tenemos que sentirnos orgullos de nuestro pasado y que ese sentimiento sirva de palanca para el futuro”.
Una pionera y un enamorado de España
Dos personas hicieron posible la toma de estas imágenes hace un siglo en Zamora. Ruth M. Anderson, que fue “ una maestra de la fotografía que se había instruido en un centro importante de fotografía” y el fundador de la Hispanic Society of America”, Archer Milton Huntington, un enamorado de España que fundó en Nueva York un museo-biblioteca dedicado a la cultura española y que envió a la pionera a fotografiar la vida en este país, sus tradiciones y costumbres.
