Un lienzo más de muralla es visible de nuevo en el parque de San Martín después del derribo del edificio situado junto a la cuesta del Mercadillo ejecutado durante la mañana de este lunes. Las máquinas han entrado con ímpetu en la parcela que otrora utilizaban los trabajadores de la antigua Iberduero, cuya edificación constaba de dos plantas y patio posterior subdividido en diferentes almacenes. Todo eso es ya historia, después de unos trabajos que se han demorado apenas unas horas.

El edificio que ha sido reducido a escombros fue adquirido el pasado año tras un acuerdo entre el Ayuntamiento de Zamora e Iberdrola. La operación se cerró en 253.000 euros, a lo que ha habido que añadir el coste de 70.000 euros para la ejecución del derribo. Se trata de una parcela de 611 metros cuadrados con forma rectangular.

La próxima maniobra dentro del proceso de liberación de la muralla consistirá en los derribos de los números 43, 45, 47 y 49 de la avenida de la Feria, los que conforman el esquinazo más próximo al parque de San Martín. Todos ellos suman 50 metros lineales y 2.000 metros cuadrados de superficie, que serán puestos a disposición de la ciudadanía para su disfrute como zona de ocio y esparcimiento.

El Ayuntamiento de Zamora ha invertido ya más de cuatro millones de euros entre expropiaciones y derribos en este entorno al objeto de convertir la muralla medieval en un activo principal para la ciudad y su turismo. Después de estos trabajos, tan solo quedarían en pie los primeros números de la Feria, los más próximos a la glorieta, donde todavía existen negocios que se niegan a vender.