“Voy a traer la recortada. Esto no va a quedar así, de la cárcel se sale, del cementerio no”. La amenaza de un hombre a una médica que le negó una ambulancia para trasladar a casa a su esposa, diagnosticada con un lumbago, ha supuesto la condena a cuatro meses de cárcel al zamorano por un delito de atentado contra la autoridad, en este caso contra un funcionario público que ejercía sus funciones como facultativo del servicio de urgencias del Complejo Asistencial de Zamora.
Las amenazas, que se sucedieron a pesar de que intervino el personal de seguridad del Hospital Virgen de la Concha, fueron reconocidas por el imputado, quien había acompañado a su esposa hasta el urgencias porque tenía un dolor en la espalda. Cuando la especialista iba a entregar el informe sobre el examen que acababa de realizar a la paciente, ya fuera de las instalaciones del Hospital, el procesado comenzó a proferir gritos.
En tono amenazante y agresivo se dirigió a la médica para pronunciar la frase en la que le advertía de que tenía una pistola recortada y que iba a matarla si no accedía a pedir una ambulancia que transportara a su mujer hasta el domicilio, tal y como admitió el procesado en el Juzgado de lo Penal.
Finalmente, el personal del servicio de vigilancia del centro sanitario tuvo que llamar a la Policía Nacional para que acudiera al Virgen de la Concha, presencia que permitió calmar los ánimos del varón, quien fue denunciado.
