El premio Zamorano del Año tuvo este año una significación especial, ya que con él se rindió un sentido homenaje a todos cuantos profesionales arriesgaron su vida para defender los montes y gentes de Zamora en los fuegos que este verano han arrasado 65.000 hectáreas.

El presidente de la Caja Rural de Zamora, Nicanor Santos Rafael fue entregando los premios a los representantes de los distintos cuerpos que intervinieron activamente en los incendios. El grueso principal, los bomberos forestales de la Junta, que representó el agente medioambiental Óscar Baladrón Colinas (Jefe de la Comarca Forestal de Villardeciervos) o el Consorcio de Bomberos provincial, con Juan Carlos Herrero García como encargado de recoger el premio, pero también los bomberos de Zamora, con su jefe José Luis Borrego, a la cabeza, el V Batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME) con sede en León que manda el teniente coronel Daniel Constantino Casado, las Briff (Brigadas de intervención) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Rafael Gómez del Amo y el coronel Miguel Fulgencio Oliver, jefe del grupo 43 del Ejército del Aire.

Otros muchos compañeros de los bomberos de la Junta, el Consorcio y el Ayuntamiento acompañaron a sus representantes en el estrado o en sala, y se hacían acreedores de una gran ovación. Tras unas palabras de otro galardonado, José Miguel Diego, de 95 años (“a mi solo me jubila el Boletín Oficial del Estado”), agradeció el honor en nombre de los premiados el periodista Celedonio Pérez, quien tituló su alocución “agradecimiento y conjuro”, una auténtica arenga para poner en pie a una provincia que debe alejarse del victimismo y explotar sus potencialidades.

Además recibieron los premios del Deporte Sara García (con cuatro Dakar a sus espaldas), el cirujano taurino Enrique Crespo Rubio (Zamorano Ilustre), y el Grupo de Coros y Danzas doña Urraca, con su director, Miguel Ángel Santos, a la cabeza.