La Diputación de Zamora ha alertado este lunes de los peligros de "una sequía tremenda", sin comparación posible en el último medio siglo. El vicepresidente tercero de la institución y responsable del área de Medio Ambiente, Javier Faúndez, ha recordado que "el cambio climático está ahí", y ha destacado que los ayuntamientos con captaciones superficiales o de los ríos "podrían tener problemas".

De hecho, desde la institución provincial, están recomendando a estos ayuntamientos que cuenten con sondeos de emergencia para disponer de un plan B y abastecer a sus vecinos: "Estamos trabajando con varios de esos municipios para ayudarles en las obras de emergencia", ha matizado Faúndez.

Por otro lado, el responsable provincial ha señalado que todos los ayuntamientos han de sensibilizarse de la necesidad de hacer un mayor control del agua: "Si no tienes ordenanza y no cobras a los vecinos, desde la Diputación tampoco vamos a asumir ningún compromiso", ha remarcado Faúndez, que también se ha mostrado contrario al sistema de tarifa plana.

En cuanto a las ayudas a los pueblos con problemas de abastecimiento, Faúndez ha citado varios pueblos donde se están llevando cisternas, y ha mencionado particularmente el caso de Rihonor, donde ya hay problemas serios ante una sequía que amenaza con dejar el río sin agua.

Impulso a la depuración

En esa misma comparecencia, Javier Faúndez ha comunicado el inicio de los proyectos para la depuración de aguas residuales en localidades de menos de 500 vecinos o equivalentes. La Diputación cuenta con 350.000 euros para estas obras, que se complementan con una cantidad idéntica por parte de la Junta y por la aportación del 20% de cada obra de los ayuntamientos.

Faúndez ha indicado que los interesados podrán solicitar estas actuaciones hasta el 20 de septiembre, y ha calculado que se podrán acometer entre seis y ocho en esta anualidad. Se priorizará inicialmente a aquellos lugares que tengan vertidos revocados.