Su estado general “no era muy malo”, aunque presentaba bastante suciedad. No en vano la mesa del grupo de Jesús en su entrada triunfal nunca había sido intervenida. Estos días el tallista zamorano José Antonio Pérez la está poniendo a punto de cara a la celebración del 75 aniversario de la real cofradía.
La restauración, autorizada en una asamblea general de la Borriquita, ha comenzado con la limpieza y eliminación de los barnices de toda la estructura, que presentaba muchas “capas de ceras”. La supresión es “un proceso lento por los productos que hay que utilizar”, indica el artesano que está trabajando en la sala destinada a las restauraciones en el Museo de Semana Santa.
Una vez que concluya la limpieza, el profesional aplicará un tratamiento preventivo contra la carcoma, ya que cuando te acercas a muy poca distancia en la madera se aprecia alguna pequeña perforación. El insecto “está dormido, pero hay que tomar todas las medidas para evitar su presencia”, describe el zamorano que ha efectuado numerosas mesas en la Semana Santa de Zamora.
Otro capítulo de la mejora será la reintegración de ciertos relieves. Así dos de los ángeles presentan las narices dañadas. En los dos rostros el tallista situará una pieza de nogal y la tallará directamente. Además la mesa, diseñada también por Florentino Trapero, presenta “problemas en las esquinas de la mesa o encuentro de molduras que se han separado ligeramente”, describe José Antonio Pérez, quien tendrá que realizar una reintegración en una de las palmas laterales, puesto que falta un pequeño fragmento de una de ellas.
Posteriormente sobre el conjunto se aplicará un acabado de ceras que “otorga otro lustre a las mesas” argumenta Pérez, quien persigue una intervención “respetuosa” que solo se aprecie en la corta distancia.
Entre las curiosidades de la mesa, el tallista subraya que en la realización de la mesa hubo varias personas implicadas dado que se observan “mucha diferencia de calidades entre los ángeles de las esquinas y los centrales”, lo que refrenda que fue realizada en la Escuela Taller del Hospicio de la Diputación Provincial bajo la supervisión del maestro Ángel Zúñiga.
La puesta a punto implica un desembolso de más de 2.800 euros para la Borriquita, una cofradía que cuenta solo con 150 hermanos, por lo que “hemos pedido la ayuda de la Junta pro Semana Santa", afirma Alberto de la Fuente.
La intervención forma parte de las actuaciones con motivo del 75 aniversario de la cofradía que, salvo sorpresas, cuando comiencen las obras del nuevo Museo trasladará su imagen titular al convento del Tránsito, lo que brindará la posibilidad de que la procesión salga el Domingo de Ramos, como en su primer año, desde la iglesia de la Magdalena.
