La Gerencia de Asistencia Sanitaria de Zamora ha destinado 105.000 euros para la adquisición de un equipo de estimulación magnética transcraneal para el Servicio de Psiquiatría que permitirá implantar este tipo de terapia en el Hospital Provincial.
El jefe de servicio, Manuel Franco explica que la nueva dotación se utilizará fundamentalmente para tratar la “depresión resistente” que no ha respondido a los tratamientos convencionales. Se trata de una técnica aprobada por la FDA (el equivalente americano a la Agencia Europea o Española del Medicamento) y por tanto perfectamente homologada, y está indicado para los casos de depresión en los que no funcionan las técnicas habituales, como puede ser la psicoterapia o los fármacos específicos para este problema de salud.
Aunque la técnica no es nueva, es ahora cuando ha llegado a un nivel de perfeccionamiento y eficacia de resultados que permite implantarla en el Hospital Provincial de Zamora con certeza de que puede ser eficaz para los pacientes de los casos en los que esté indicada su aplicación.
“Es una técnica que empezó a funcionar a partir de los años 90. Pero como sucede con otras técnicas inicialmente los aparatos eran poco precisos. Sin embargo, desde diez años para acá se han empezado a observar resultados muy positivos”, indicó el doctor.
Patologías
Además de la depresión persistente, esta terapia puede ser eficaz en casos de estrés postraumático, adicción a sustancias, la demencia o la esquizofrenia. Sin embargo es la depresión la patología donde la utilización de la estimulación magnética transcraneal ha tenido ya unos resultados más concluyentes. Para el resto de trastornos existen estudios que parecen indicar que también puede ser eficaz, aunque Franco indica que se necesita una mayor evidencia, sobre todo más estudios que corroboren la idoneidad de aplicar la estimulación magnética frente a estas dolencias.
La estimulación magnética transcraneal, se trata de una técnica no invasiva y muy segura, cuyo mecanismo de funcionamiento es la creación de campos magnéticos que mejoran el funcionamiento neuronal. “Cuando aplicamos el campo magnético la persona no nota nada, es internamente donde se produce una polarización neuronal que se ha visto que es positiva para tratar estos casos de depresión persistente”. Es por tanto una técnica sin prácticamente ningún riesgo.
El electroimán emite pulsos magnéticos sin causar dolor que estimulan las células nerviosas en la región del cerebro que controla el estado de ánimo y la depresión. Se cree que activa regiones del cerebro que tienen actividad disminuida en personas con depresión.
Durante una sesión de estimulación magnética transcraneal se coloca una bobina electromagnética al lado del cuero cabelludo, cerca de la frente. Luego, el dispositivo envía pulsos magnéticos a través del cráneo, estimulando las células nerviosas en la parte del cerebro vinculada al estado de ánimo.
