Ante la escasez de vocaciones, revolucionarias fórmulas para lograr afrontar el envejecimiento que experimenta la curia zamorana que atiende a 303 parroquias. Esta parece ser la premisa que ha puesto en marcha la Diócesis de Zamora, inmersa en estos momentos en negociaciones con otras diócesis, para que sacerdotes que realizan estudios superiores en la vecina ciudad de Salamanca atiendan “algunas parroquias de Zamora en calidad de colaboradores”, según han confirmado fuentes diocesanas a este medio.
Las negociaciones se encuentran muy avanzadas en el caso de la diócesis de Kerala, en La India, gracias a la reciente visita de su obispo, Remigiose Inchananiyil, quien conoció de primera mano la realidad de la iglesia zamorana.
El encuentro con monseñor Valera ha hecho ya posible que un sacerdote de la provincia eclesial india se incorpore al arciprestazgo de Sayago para ayudar en laborales pastorales, concretamente en la parroquia Nuestra Señora de la Asunción de Fermoselle.
El acuerdo con La India, todavía pendiente de ser ratificado por ambas diócesis, conllevaría que dos o tres sacerdotes colaborasen durante un período de cuatro años, renovables, con la Diócesis de Zamora.
“Estamos viviendo un nuevo tiempo en el que hay que explorar nuevas fórmulas” sostienen fuentes diocesanas que dejan la puerta abierta a que el convenio con esta diócesis se extienda a algún territorio más, aunque sin precisar si serían a sacerdotes procedentes de otras provincias de España o bien de otros continentes.
Y es que el cardenal y arzobispo emérito de Abuya (Nigeria) John Olorunfemi Onaiyekan, en su reciente visita a Zamora, manifestó el deseo de tender puentes entre ambas diócesis y crear algún tipo de colaboración.
“Sería enriquecedor para todos que sacerdotes nigerianos pudieran integrarse, como uno más, en la diócesis de Zamora” dijo. “Sería bueno, no sólo para solventar la carencia de vocaciones, sino para facilitar la cercanía hacia los inmigrantes y además ofrecer pastores jóvenes que hablen como los jóvenes de hoy. Da igual que sean jóvenes de España o de Nigeria, los jóvenes tienen un idioma universal. Por estos motivos, la iglesia de Nigeria podría aportar mucho a Zamora”, expresó el sacerdote, candidato al Nobel de La Paz. que es amigo personal del obispo de Zamora desde hace más de una década.
La Diócesis de Zamora, que capitanea Fernando Valera Sánchez desde hace dos años, cuenta con un total de 111 sacerdotes incardinados en ella, de los cuales ejercen un total de 99 repartidos entre siete arciprestazgos que atienden la nada despreciable cifra de 303 parroquias. En el reparto, Aliste-Alba cuenta con 84 parroquias, Sayago con 56, Benavente-Campos ostenta la cifra de 41 parroquias. El Pan tiene 40 y Toro-Guareña así como El Vino presentan 32 cada una y Zamora ciudad reúne la cantidad de 18 parroquias, según datos publicados en la página web de la Diócesis de Zamora.
En el Seminario Mayor se están formado tres alumnos, dos de ellos estudiando Teología y uno, Filosofía, mientras que en el Seminario Menor, que ha echado el cierre este junio, había cuatro adolescentes y 34 alumnos dirigidos por uno de los sacerdotes más jóvenes de la Diócesis de Zamora, Millán Núñez Ossorio, ordenado presbítero en julio del año 2019.
En los últimos tiempos la escasez de curas junto a la cantidad de responsabilidades que tienen muchos de ellos ( algunos al frente de una veintena de parroquias y con diversas responsabilidades en el organigrama diocesano) han hecho que los laicos asuman cada vez más responsabilidades dentro de la vida diocesana. Así monseñor Valera Sánchez ha puesto al frente de la Oficina de Transparencia del Obispado de Zamora a Juan Carlos Alfageme Matilla, de la Oficina de Oficina de Prevención e Intervención en posibles casos de abusos a menores y personas vulnerables a María Jesús Sánchez Sanz o incluso ha apostado por un nuevo equipo económico para administrar los bienes financieros y patrimoniales de la Diócesis de Zamora dirigido por el profesor titular de Filosofía en la Universidad de Valladolid, el toresano José Manuel Chillón Lorenzo.
