A dos meses para la inauguración de la feria Fromago, que tendrá lugar entre el 15 y el 18 de septiembre, la organización de la muestra internacional del queso de Zamora está apretando con fuerza para atraer al mayor número de visitantes que sea posible. Desde esa óptica se entiende el desembarco en Madrid del rebaño artificial de ovejas que funciona como exposición promocional de la cita. Las 33 reproducciones de estos animales se ubican desde ayer en la céntrica plaza de Callao con el objetivo de llamar la atención del inabarcable mercado de la capital de España.

El presidente de la Diputación habla tras las figuras de la muestra. | Cedida

En ese escenario, el encargado de defender la pertinencia de viajar a Zamora para la feria fue el presidente de la Diputación, Francisco José Requejo, que se desplazó a Madrid con varios miembros de su equipo de Gobierno y que procedió a enumerar los datos principales de la muestra, antes de recordar que las buenas conexiones entre la sede de Fromago y la capital de España facilitan un viaje cómodo para disfrutar del evento.

Los gigantes de Capitonis, en Madrid. | Cedida

“Estamos muy bien comunicados con los ejes fundamentales para la promoción de nuestros productos”, subrayó el mandatario liberal, que recordó que Zamora y Madrid están separados por dos horas y media en coche y por poco más de una hora en tren de alta velocidad. Esa proximidad ferroviaria facilita incluso un posible desplazamiento de ida y vuelta en el día para disfrutar de un evento quesero que se desarrollará por las calles de la ciudad, a lo largo de un recorrido expositivo de dos kilómetros de la Marina a la Catedral.

"Localización estratégica"

Requejo habló de “localización estratégica” y llamó a los madrileños a viajar a Zamora, igual que hizo antes con los vallisoletanos, los sevillanos, los vascos, los gallegos, los salmantinos y los leoneses, y como hará próximamente con los cántabros. La exposición de las ovejas está sirviendo como eje de una promoción que está llevando al dirigente provincial y al resto de la organización por un buen puñado de capitales en España. La idea es frenar en agosto, a la vista del parón generalizado de la actividad, y volver a acelerar en las dos semanas previas al evento.

Con esa estrategia como telón de fondo, Requejo quiso tener también unas palabras de aliento para todo el sector del ovino en la provincia, “el que proporciona la materia prima adecuada para la elaboración de los productos queseros de mayor calidad del país”. “Las instituciones de Zamora le debíamos a los negocios la celebración de una feria de este nivel”, remarcó el presidente de la Diputación, que agradeció la predisposición de los empresarios y de los emprendedores: “Teníamos que estar a la altura”, añadió el dirigente político.

Presencia de Capitonis

Requejo también tuvo palabras de reconocimiento para Capitonis Durii, que trasladó a Madrid a algunos de sus gigantes para zamoranizar aún más la plaza de Callao, donde se mantendrá la exposición de las ovejas de Fromago durante todo el fin de semana. La expectativa es que un porcentaje de los 200.000 visitantes que se espera que visiten la feria terminen de convencerse gracias al rebaño artificial ubicado ahora en esa zona.