La Comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Zamora dictaminará esta tarde una propuesta para la alteración de la calificación jurídica de los kioscos de prensa de titularidad municipal ubicados en la vía pública y que se encuentran cerrados y sin uso alguno. Este será el primer paso para la desafección de los kioscos como bienes de concesión demanial para la venta de prensa, revistas y similares, y puedan destinarse a otros fines o usos de carácter social u otras actividades que redunden en beneficio de la comunidad.

En el informe que acompaña al expediente y acredita la conveniencia del cambio de uso se indica que "a la vista de su abandono y desuso actuales, dado que su afectación a la venta de prensa y similares carece de demanda en la actualidad, habiendo quedado desiertos los últimos procedimientos concesionales seguidos para dicha finalidad, por lo que siendo necesario aprovechar dichas instalaciones para otros usos, se considera que la vía más adecuada es la de su cesión de uso a entidades o asociaciones sin ánimo de lucro, al objeto de que sean utilizados por las mismas, entre otras finalidades, como puntos de información para los vecinos del barrio, tanto de las actividades propias de las asociaciones o entidades como de las llevadas a cabo por el Ayuntamiento de Zamora y que pudieran ser de interés general para los ciudadanos".

Las ubicaciones

Los kioscos objeto de desafectación son los situados en la Plaza de Alemania, Plaza de San Lázaro, Plaza de la Puentica, Plaza del Cuartel Viejo, Obispo Nieto, Plaza de la Marina Española (junto a cafetería Rey Don Sancho), Condes de Alba y Aliste, Requejo, Cardenal Cisneros y Candelaria Ruiz del Árbol.

Kiosco cerrado en una calle de Zamora. Cedida

Los kioscos modelo "Zamora" que tienen una superficie de 8 metros cuadrados y forma trapeziodal, asemejando la estructura del casco histórico de la ciudad rematada por una pequeña cúpula en el extremo que asemeja a la de la Catedral, se instalaron por el Ayuntamiento en el año 2004 con el fin de sustituir los antiguos kioscos de ladrillo que carecían de las mínimas medidas de confort y seguridad, y dar la posibilidad de regentarlos a personas en situaciones familiares, socio laborales y económicas especiales. El canon de explotación variaba entre 135 y 183 euros anuales, dependiendo de las calles en las que estaban asentados. En el año 2011 ya había seis de ellos desocupados y en el los tres procedimientos que se han efectuado para su readjudicación ha sido manifiesta la falta de demanda; por lo que los kioscos se han quedando vacíos a la vez que sus titulares se jubilaban o abandonaban la actividad.

El propósito con esta desafectación es el de buscar nuevos usos para los kioscos al objeto de evitar su abandono y degradación, toda vez que el uso al que están adscritos, de venta de prensa y similares, es obvio que carece de interés y perspectivas de futuro en este momento.