El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha anulado el plan de servicios de extinción de incendios para Castilla y León aprobado por la Junta el pasado 31 de marzo. El órgano ha admitido un recurso presentado por el CSIF y ha tumbado el decreto del Gobierno autonómico al entender que "no establece plazos, no fija dotación de recursos económicos, no tiene en cuenta los incendios forestales y la figura del bombero forestal, no distingue entre funcionarios profesionales y voluntarios e invade competencias".

El propio sindicato demandante ha sido el encargado de comunicar este "serio y definitivo varapalo" para la entonces Consejería de Medio Ambiente: "Si en algún otro recurso ya se advertía de que la reciente normativa de la Junta sobre los servicios de extinción de incendios y parques de bomberos no se ajusta a derecho, esta nueva sentencia resulta demoledora, y profundiza en los motivos por los que el plan ni es asumible ni puede aplicarse, como señaló el propio Consejo Consultivo de Castilla y León”, ha recalcado el CSIF. 

 "La Consejería de Medio Ambiente vuelve a quedar en ridículo otra vez. ¿Qué más tiene que pasar, tras el reciente incendio forestal de la Sierra de La Culebra, para que el consejero se reúna con los representantes sindicales y aborde la extinción de incendios con seriedad y de manera global?", se han preguntado desde el sindicato, antes de aclarar que la sentencia incide en que "el plan no garantiza la presencia de funcionarios bomberos profesionales en la prestación del servicio contra los incendios".

Reconocimiento de la figura del bombero forestal

Asimismo, el tribunal señala que la Ley de Protección Ciudadana considera la extinción de incendios y salvamento como servicios esenciales, y que, si bien pueden complementarse con voluntarios, no se debe sustituir a los funcionarios profesionales. Sin duda, para CSIF, "es una clara alusión a la necesidad de que el personal de los parques sean bomberos funcionarios y profesionales". Es más, esta organización sindical reclama y urge el reconocimiento de la figura del bombero forestal.

En el caso de los parques para municipios con menos de 20.000 habitantes, el plan apela a una memoria que hace referencia a instalaciones, infraestructuras, equipamiento, personal o mantenimiento. Eso sí, CSIF critica que no se menciona de dónde van a llegar los recursos económicos para su puesta en marcha y mantenimiento.

Respecto a los contenidos del plan que no son de su competencia, el TSJCyL asegura que el plan se extralimita en cuestiones como la distribución de parques de bomberos, tipología, organización o estructura. “Pasa por alto que el municipio ejerce competencias en materia de prevención y extinción de incendios”, recoge la nota del sindicato.

Es por ello que el sindicato reclama que el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, se reúna con los representantes sindicales, y aborde la extinción de incendios con “seriedad” y de manera global, para reconducir su “nefasta” gestión, tanto en los fuegos forestales como en lo que se refiere a los parques de bomberos.