Los trabajadores llevan a cabo el lavado de “cara” de las aceras y calles de la ciudad. Los dos nuevos vehículos eléctricos ya disponibles permiten limpiar con jabón y agua a presión las aceras. A estos se les sumarán otro tipo de maquinaria durante los próximos meses.

En si mismo, se sigue continuando con el plan de eliminación de pintadas de la vía pública, de las cuales muchas ya han sido retiradas de edificios tanto públicos como privados. Este proceso se ejecuta mediante el repintado de las fachadas.

Para solicitar la eliminación de los grafitis por parte de las edificaciones privadas habrá que presentar la correspondiente solicitud a través de los administradores de fincas, que autorizan al Ayuntamiento a operar especificando cuales son los lugares afectados.

Por otra parte, avanza la colocación de los nuevos contenedores de carga lateral por toda la ciudad, y a los que se suman los contenedores recibidos de carga trasera. Los contenedores de “residuos sólidos urbanos” (RSU) se irán renovando poco a poco al igual que los de envases, papel y vidrio, a los que se sumará el quinto: residuos orgánicos.