Buena tarde de toros para rematar la Feria Taurina de San Pedro en un día caluroso y con una plaza que no llegó a llenarse en su mitad, con el sol prácticamente vacío, que tuvo ocasión de ver abrirse la puerta grande para los tres diestros que iniciaron el paseíllo: Morante de la Puebla, Daniel Luque y Alejandro Marcos.
Abrió plaza Junito, de la ganadería de Castillejo de la Huebra, que tocó lidiar a Morante de la Puebla, vestido de gris. Tras un bonito saludo el sevillano mostró pinceladas de su arte con la muleta ante un enemigo bravo en el caballo. Mató mal, con pinchazo y estocada caída y se llevó el aplauso del público, al que había brindado l faena.
Ficha técnica
Plaza de Toros de Zamora. Segunda corrida de la Feria de San Pedro, organizada por Circuitos Taurinos. Tarde soleada y calurosa. Media entrada.
Morante de la Puebla. Primer toro, pinchazo y estocada caída. Aplausos. En el cuarto, pinchazo y estocada recibiendo. Dos orejas.
Daniel Luque. Segundo de la tarde, estocada. Una oreja. Estocada caída, una oreja.
Alejandro Marcos. Tercero: estocada caída, una oreja. Sexto: pinchazo y estocada, una oreja. Banderilleó Javier Gómez Pascual.
Su segundo enemigo, cuarto de la tarde, fue Venturoso, del Puerto de San Lorenzo, un toro “anovillado” de 475 kilos, que cumplió con un buen tercio de varas del toro. Empieza Morante la faena de muleta con ayudados por alto, llevando al toro del centro del ruedo, donde consigue buenos derechazos y naturales. Una faena donde se pudo ver un buen toreo de empaque morantista. Mató el diestro con pinchazo y estocada recibiendo, y la actuación le hizo acreedor de las dos orejas.
Daniel Luque se vio las caras con el mayor toro del festejo, Trotalindes, de 570 kilos, de Montalvo, al que toreó con su capote una serie de verónicas de gran calidad. Se llevó un susto con una colada del toro, que no entró al engaño aunque por fortuna no cogió al diestro. Al salir del caballo de picar el toro dio una voltereta sin consecuencias. Luque remata una faena de tronío, con buenos naturales y muy quieto. Mata de estocada y se le premia con una oreja. Luque, de azul y oro, había brindado la faena al público.
El segundo de su lote, quinto de la tarde, Lisongero, de Valdefresno, esperaba a los banderilleros en esta suerte y les puso en apuros cuando ejecutaban el pinchazo, y a punto estuvo de coger a un miembro de la cuadrilla de Luque. Fue un toro que en la muleta se paró pronto, obligando a Luque a pegarse un gran arrimón. Mató el diestro de pinchazo y estocada y se llevó una oreja, la segunda de la tarde para él.
El salmantino Alejandro Marcos, de verde y oro, lidió a su primer enemigo, el tercero de la tarde, de nombre Parasolillo, de doña María Loreto Charro Santos (declarado mejor toro de la corrida), al que recibió con un bonito saludo con el capote. Destacar el buen par de banderillas del zamorano de Guarrate Javier Gómez Pascual, de la cuadrilla de Marcos, quien tras brindar al público compone una faena con buenos detalles, pero sin la colaboración del toro. No obstante, y tras matar con una estocada caída, se le premió con la oreja.
Recibió al que cerraba plaza, Burretorate, de Pedraza de Yeltes, con un saludo capotero poniendo una rodilla en tierra aunque el toro, por desarrollar sentido o por mala visión se olvida del capote y va al cuerpo, aunque no hubo que lamentar ninguna desgracia. Brinda el toro al banderillero Gómez Pascual y Manuel Alejandre delegado gubernativo en el callejón, ambos zamoranos. Logra Marcos buenas tandas de naturales que hacen vibrar al público y tras matar, con pinchazo y estocada, se hace acreedor de una oreja.
Alberto Sandoval fue premiado como el mejor picador y Juan Conteras, como lidiador en una buena tarde de toros.
