La nueva empresa concesionaria del servicio de recogida de residuos y limpieza viaria ha comenzado por fin a renovar los contenedores de basura ubicados en la vía pública, cumpliendo así con una recurrente reclamación ciudadana harta de depósitos en auténtico mal estado. En concreto, se han adquirido 2.134 recipientes, cuya gran mayoría se instalará en las calles de la capital zamorana a lo largo de las próximas semanas, guardando una parte a modo de stock para atender nuevas necesidades o efectuar reposiciones a medida que haga falta. Más de la mitad de los elementos irán destinados a la recogida de residuos generales y de carga lateral, aunque también los hay por encima y por debajo de los 3.200 litros estándar.

El Ayuntamiento de Zamora ha sido quien ha informado de la colocación de los contenedores después de tener conocimiento del inicio de los trabajos por parte de la nueva concesionaria. A esa gran mayoría de habitáculos de 3.200 litros de carga lateral habrá que añadir otros 450 recipientes de carga superior y una capacidad de 3.000 litros destinados fundamentalmente a la recogida selectiva de vidrio, cartón y envases. Además, otros 400 contenedores tendrán cara trasera y 800 litros de capacidad para su utilización en las zonas periféricas de la capital, mientras que se reserva una mínima parte para contenedores menos usuales como los de 1.000 litros y carga lateral o 360 litros y carga trasera. Todos ellos serán de color gris marengo y sus tapas irán cambiando de tonalidad en función de la clasificación de residuos por su naturaleza, ya sea en azul o en amarillo.

Pese a que la nueva empresa concesionaria del servicio de basuras se hizo cargo de la gestión a principios del mes de abril, el inicio formal del contrato se produjo en la jornada de ayer, por lo que la reposición de los contenedores es la primera medida que se lleva a cabo. La operación ha comenzado por la zona de Tres Cruces y posteriormente se irá completando a través de los barrios. Está previsto que el siguiente turno sea para los Bloques, la margen izquierda del río Duero, San José Obrero y San Lázaro, para posteriormente hacer lo propio en el resto de la ciudad. “Teniendo en cuenta la magnitud de todo el proceso, dado que los contenedores se montan en una nave y que hay que recoger al mismo tiempo los contenedores viejos, el plazo estimado para la colocación es de unos tres meses”, apuntan desde el Consistorio. Además, durante este tiempo se irán colocando también doce nuevas islas soterradas para la basura.