Izquierda Unida aspira a presentarse con sus siglas en 2023 y confía en "volver a ganar" las Elecciones Municipales en Zamora. El propio alcalde de la ciudad, Francisco Guarido, ha sido el encargado de poner voz a ese deseo durante la comparecencia que ha protagonizado ante los medios de comunicación en compañía del coordinador provincial del partido, Miguel Ángel Viñas; y de algunos de los invitados a la fiesta anual de la organización, que se desarrolla durante este sábado en la Josa.
Guarido ha matizado que cualquier decisión definitiva tendrá que contar con el respaldo de la dirección federal y ha insistido en que los nombres que compondrán la lista y el orden de la misma no se conocerán hasta después del verano. Es decir, se mantiene la incógnita sobre el futuro político del alcalde, aunque él mismo ha confirmado que se implicará en la campaña de Izquierda Unida independientemente de su rol dentro de la candidatura.
Defensa de la militancia tradicional
Por otro lado, el dirigente local ha celebrado la presencia en Zamora de distintos alcaldes y compañeros procedentes de otros territorios, y ha reivindicado "la militancia tradicional, con sedes abiertas, trabajo y una organización detrás". Guarido ha resaltado el valor del compromiso político ajeno a los resultados electorales y ha puesto como ejemplo a Miguel Zamorano y Amable García, que serán recordados y reconocidos este sábado en La Josa.
Por su parte, Miguel Ángel Viñas ha subrayado también que "si Izquierda Unida es algo es gracias a su militancia", y ha insistido en el legado que les dejaron los militantes mayores y que ahora ellos pretenden transmitir a las nuevas generaciones del partido.
En cuanto a la cuestión política y a la elaboración de candidaturas de la formación para 2023, Viñas ha reconocido la situación "precaria" en la provincia, lo que dificulta la puesta en marcha de muchos proyectos electorales en los municipios, pero ha aclarado que no habrá listas "fantasma" con gente que "viene a última hora sin un mínimo de garantías ideológicas". El coordinador provincial de IU ha citado expresamente el caso de Casaseca de las Chanas en 2015, cuando sus representantes terminaron dándole la Alcaldía al popular Fernando Martínez-Maíllo.
Una organización sólida
También ha intervenido en la comparecencia José Antonio García Rubio, el representante de la facción de IU que defiende una mayor autonomía de la marca ante las tentaciones de confluencia. El miembro de la coordinadora federal ha lamentado la presencia de "las fuerzas reaccionarias" en el nuevo Gobierno de Castilla y León, ha advertido sobre lo que puede ocurrir en Andalucía y ha defendido la existencia de una "organización tremendamente sólida que se diferencie de otras líquidas".
