El Gobierno de España ha desbloqueado por fin el dinero para la restauración y consolidación de diferentes tramos de la muralla de Zamora. Se trata de una partida prometida por el ministro Miquel Iceta durante una visita a la capital realizada el pasado enero en la que apuntó a un inicio “inminente” de los trabajos. Frente a eso, la realidad es que han pasado cuatro meses y no hay rastro de obras en el monumento. Ahora, un acuerdo entre el Ministerio de Cultura y Deporte y el de Industria, Comercio y Turismo permitirá la llegada de esos fondos incluidos dentro del Plan de Recuperación y Resiliencia. Un montante superior al millón de euros que urge, teniendo en cuenta el delicado estado de conservación que presenta el elemento patrimonial que rodea el Casco Histórico.

Los ministros Miquel Iceta y Reyes Maroto han firmado este pasado lunes el acuerdo para la transferencia de 35 millones de euros de Turismo a Cultura para la rehabilitación de patrimonio histórico. Un plan en el que entra la consolidación de las murallas de Zamora, cuyo proyecto conoció el ministro de Cultura el pasado mes de enero durante una visita a la capital. En esa cita, el dirigente socialista apuntó a un presupuesto de 1,7 millones de euros para iniciar las obras “de forma inmediata”. Algo que no ha ocurrido.

Un mes antes de esa visita de Iceta a Zamora se dejó caer por la capital su número dos. Más cauto, el secretario general de Cultura y Deporte, Víctor Francos, deslizó la posibilidad de comenzar los trabajos de consolidación durante los años 2023 y 2024. Un plazo que sí se ajustaría a la realidad que marcan los procedimientos en materia de contratación, especialmente en lo tocante al patrimonio histórico, que requiere de permisos especiales para su intervención.

Los trabajos se desarrollarán durante más de dos años en el monumento

La intervención que el Ministerio de Cultura ejecutará en la fortificación medieval se ajustará a lo establecido en el nuevo Plan Director de la Muralla elaborado por un equipo de la Universidad de Salamanca capitaneado por Leocadio Peláez. Se trata de un documento de más de 4.000 páginas en el que se analiza de forma pormenorizada el estado de cada uno de los paños del monumento, que se reparte en tres recintos cuya construcción va del siglo XI al XIV. Este plan debe servir para planificar y sacar a licitación los proyectos de ejecución de la restauración para posteriormente ser adjudicados y comenzar con las obras. En el seno de la administración calculan que esto podría ocurrir a partir del año 2023 y que los trabajos se prolongarían durante dos o tres años.

Por el momento, el Ministerio de Cultura ha comprometido esos 1,7 millones de euros, aunque Miquel Iceta ha dejado abierta la puerta a poner más dinero encima de la mesa si surgen emergencias que obliguen a intervenir de inmediato. Eso sí, por el momento es una incógnita el lugar escogido para comenzar con la consolidación. Todo ello, a pesar de que el Ayuntamiento de Zamora ha urgido arrancar por el espacio recién liberado en la avenida de la Feria.