El mosaico de San Isidro Labrador datado en 1922 que ocupaba la cima de la fachada de la antigua fábrica de Harinas Colino, en la avenida de la Feria, ha sido recuperado y colocado en el portal número 14 de la misma calle, en el edificio que se levantó tras al derribo del inmueble industrial, en 2018, tras cesar su actividad poco tiempo antes.
El promotor y constructor del edificio de 33 viviendas que se levantó en el solar, José Manuel Campos Ramos, explica que se tuvo la precaución de documentar de forma precisa el mosaico, con medidas y número de piezas además de documentación gráfica, antes de intentar desmontarlo. "Por desgracia, no fue posible sacarlo en su integridad y sólo se pudieron salvar algunas piezas" comentaba ayer poco antes de la inauguración de la réplica, realizada con los azulejos originales que se pudieron rescatar y el resto réplicas fabricadas en Toledo.
El constructor tenía interés en que el mosaico quedara de alguna forma a disposición de la ciudad. "Intentamos ponerlo en la fachada del nuevo edificio, pero no pegaba con el tipo de inmueble que hemos hecho aquí" de un estilo mucho más moderno. La solución ha sido colocarlo en uno de los portales, con un espejo enfrente, de tal forma que sea visible para el viandante que pasee por la acera en cualquiera de los dos sentidos.
El párroco de San Lázaro, Agustín Montalvo, se encargo de bendecir el mosaico, en un acto en el que fue invitado el presidente de la Junta Agropecuaria Local, Rubén Carretero, en un acto que tuvo lugar precisamente en el día de San Isidro.
