El primer grupo de trabajo creado por la Mesa de Despoblación acordará este miércoles una batería de demandas concretas para que las administraciones superiores actúen y se tomen como prioridad el problema demográfico que amenaza la propia existencia de Zamora. El presidente de la Diputación, Francisco José Requejo, confirmó la celebración de este encuentro en el que más de una treintena de personas procedentes del ámbito institucional, empresarial y social se esforzará por ordenar las principales reivindicaciones del territorio para afrontar, desde ya, una realidad que sitúa a la provincia ante un abismo próximo.
Apuesta por la cogobernanza
El mandatario liberal aclaró que Zamora apuesta así por “la vía institucional” para tratar de atajar sus problemas, y destacó el valor de la “cogobernanza” desde cada uno de los niveles para hacer frente a los acuciantes riesgos en el territorio: “Confío en eso, en ir todos a una”, aseguró Requejo, al ser cuestionado por el movimiento reivindicativo programado para este jueves en León. La provincia vecina ha convocado un parón para visibilizar su situación y mostrar unidad en la defensa de sus intereses.
El dirigente zamorano expresó su respeto por esa manera de reivindicar, pero insistió en el diálogo: “Vamos a ver si somos capaces de sacar lo que necesitamos”, recalcó Requejo, que sí adelantó que una de las demandas que saldrá con seguridad de la reunión de este miércoles por parte del grupo de trabajo tendrá que ver con la exigencia de un plan especial para dinamizar la economía provincial.
A partir de ahí, y más allá del resto de propuestas en firme que salgan de ese encuentro, el segundo de los grupos de trabajo que se creó en la Mesa de la Despoblación encarará próximamente el modo más idóneo de aprovechar la fiscalidad diferenciada con la que contará Zamora a partir de ahora: “Necesitamos utilizarla en las mejores condiciones que sea posible”, subrayó de nuevo Requejo.
Cartas a las administraciones
En el marco de ese mismo asunto, la Diputación ya ha remitido sendas cartas al Ministerio y a la Consejería de Hacienda con el fin de concertar reuniones con sus responsables y explorar de qué modo se puede rentabilizar mejor el nuevo estatus de la provincia en materia fiscal. El contenido de la misiva y del futuro encuentro “estará limitado a eso” y, en principio, tanto los responsables estatales como los autonómicos están buscando la fecha adecuada para recibir a la delegación zamorana.
Por otra parte, dentro de las reivindicaciones de la provincia, Requejo anunció que el equipo de Gobierno de la Diputación sigue pendiente de los precios, las frecuencias y la estabilidad de los viajes en tren entre Zamora y Madrid. El propio dirigente liberal ha sido muy insistente a la hora de exigir que el trayecto hacia la capital de España sea declarado como Obligación de Servicio Público, en aras de blindarlo ante los efectos de la oferta y la demanda.
Con estos antecedentes como telón de fondo, Requejo no descartó incrementar la presión sobre el Gobierno “para reclamar lo que es justo” para Zamora. El presidente provincial considera que los precios actuales “son carísimos” y que los horarios no se adaptan a las necesidades de la provincia, como subrayan algunos de los afectados por la situación. Aquí, una buena parte de los viajeros habituales del primer tren de la mañana estima que la salida debería adelantarse para que la llegada a Madrid se produjera a una hora más temprana y compatible con la entrada a los puestos de trabajo.
Por lo pronto, Requejo no ha hallado respuesta definitiva a esa demanda, aunque sí se espera que el asunto de los precios se pueda resolver a corto plazo a través de bonos que permitan abaratar el coste para viajeros habituales.
