El intenso frío de la mañana no amedrentó a los zamoranos que quisieron acompañar a la Cofradía de Nuestra Señora de la Concha. Al ritmo de flauta y tamboril esperaban a la representación de los vecinos de La Hiniesta —comandada por su alcalde, Ricardo Casas—, que llegó hasta la explanada junto a la iglesia de San Lázaro para volver a ejecutar el corto pero vistoso baile de los pendones, con las pesadas telas púrpura y roja ondeando y entrecruzándose para representar el hermanamiento de ambas localidades.

VÍDEO | Rogativa de San Marcos entre Zamora y La Hiniesta

VÍDEO | Rogativa de San Marcos entre Zamora y La Hiniesta B. B. G.

Un hermanamiento que también se materializó con el tradicional intercambio de bastones de mando entre los ediles. Tras el acto, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, agradecía esta vuelta a la normalidad y a la recuperación de las actividades pre pandemia. “Son costumbres que se deben mantener y volver al rutina significa también volver a la normalidad económica, de turismo, de comercio y hostelería, que es bienvenido”, agradeció.

Procesión tras la rogativa de San Marcos. EMILIO FRAILE

Subida a San Vicente

No dejó de sonar la flauta y el tamboril en el recorrido en procesión que hicieron los participantes, con los pendones abriendo el desfile, desde la iglesia del barrio de San Lázaro hasta la plaza del Fresco, donde se celebró una eucaristía en la parroquia de San Vicente. Antes de entrar, el presidente de la Cofradía de Nuestra Señora de la Concha, Ricardo Flecha, explicaba que esa nueva fecha, el sábado más cercano a la festividad de san Marcos, será en la que ahora se celebre esta rogativa, en vez del habitual día del santo, el 25 de abril. La razón está en que, cuando cae en día laborable, es más difícil que tanto los vecinos de Zamora como los de La Hiniesta puedan acompañar en un acto que tiene siglos de historia. El próximo encuentro será ya el día grande de la fiesta, el próximo 6 de junio.