La tradición es la transmisión del fuego, los pueblos auténticamente tradicionales son los que empeñan sus empeños comunes en revitalizar el presente con los pies en el pasado y la mirada en el futuro para avizorar nuevos finiesteres”, señaló el Premio de las Letras Castilla y León 2021, el zamorano Juan Manuel de Prada quien una vez recibidas todas las distinciones habló en nombre de los galardonados en la entrega de los Premios Castilla y León, celebrada en La Bañeza.

En su intervención el escritor señaló que Castilla y León es una “comunidad vital, muy antigua y moderna” a la vez, donde el sentido del arraigo a la tierra y el sentido de la reverencia a quienes “nos precedieron crean fuertes vínculos que nos permiten asomarnos al futuro con nuevos bríos”.

Representante de la Fundación Eusebio Sacristán, Premio Valores Humanos Ical

El premiado indicó que estos galardones les permiten incorporarse “a un pasmoso elenco de eminentes artistas, escritores, investigadores, deportistas, académicos, humanistas y promotores de las más nobles causas”. Para a renglón seguido recordar a los que les precedieron.

Y es que Juan Manuel de Prada, el tercer zamorano que logra el galardón de las Letras tras Claudio Rodríguez y Jesús Hilario Tundidor, se refirió a los reconocidos de ediciones previas como los “gigantes” a los que auparse para “añadir un granito de arena” a la “montaña” que ellos alzaron. Aseguró que todos guardarán estos galardones en el “tabernáculo del corazón”, por ser una distinción que nace de los lazos cordiales que mantienen con Castilla y León, la tierra “hospitalaria en que hemos nacido o nos hemos criado, la tierra que ha alimentado nuestras vocaciones e inspirado nuestra tarea”.

Representante del Museo Casa Botines, Premio de las Artes Ical

El escritor mencionó a los “adanistas” y “demagogos” que “denigrar” a los castellanoleoneses dicen que son “tradicionales”, ya que consideró que desde el reconocimiento a los que les precedieron, este pueblo se asoma “sin miedo” a los retos para situarse “audazmente en la vanguardia”.

“El autor de “La tempestad”, con la que consiguió hace 25 años el Planeta, enriqueció su alocución con referencias a uno de sus autores de cabeza Chesterton, de quien asumió el concepto de “democracia de los muertos” y aseguró que “nadie tiene derecho a derribar de un capirotazo lo que las generaciones previas erigieron con infinito esfuerzo: porque en el esfuerzo de esas generaciones hay mucho amor insomne, muchos sacrificios ímprobos, muchas lágrimas vertidas, muchos júbilos compartidos”.

Miguel Ángel Verdugo, Premio Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades Ical

De Prada apuntó que todos los demagogos han tratado de destruir o extraviar la “llave de la tradición” y los lazos de unión para imponerse, porque recordó que las personas “desvinculadas” se convierten en “carne de ingeniería social”. Apuntó que la tradición, al crear vínculos entre los hombres, forma pueblos “fuertes, inexpugnables al saqueo material y moral”, frente al “individualismo” que se precipita en la masificación.

La nadadora Marta Fernández Premio Castilla y León del Deporte Ical

La comunidad “madre de corazones y de brazos” en palabras de Miguel de Unamuno, otro de sus referentes, es una empresa compartida en la que cada generación ha hecho aportaciones “señeras” que defendió deben ser incorporadas “como cimiento sobre el que seguir construyendo”. “Quienes nos precedieron nos entregaron un tesoro que tenemos la obligación de custodiar; pero no pasivamente, como si fuese una pieza arqueológica, sino con el esmero creativo con que cuidamos un árbol restallante de savia, para que nos brinde una sombra cada vez más frondosa”, precisó en su discurso que cosechó una gran ovación.