La vicepresidenta segunda de las Cortes y secretaria de Organización del PSOE en Castilla y León, Ana Sánchez, se preguntó ayer “si hay un candidato a la investidura” y exigió al presidente Alfonso Fernández Mañueco que “dé la cara”, ya que considera que su “desidia y pusilanimidad ralla la falta de respeto a esta tierra”.
“Apenas semanas después, Alfonso Fernández Mañueco sigue en la tumbona, su desidia no tiene un solo pase”, manifestó en declaraciones a los medios después de la reunión de la Mesa de las Cortes para el nombramiento del nuevo secretario general-letrado mayor de la institución parlamentaria, que tuvo lugar en el día de ayer en el organismo regional.
Sánchez manifestó que el procedimiento se ha completado con la propuesta del presidente de las Cortes, Carlos Pollán, el pasado 18 de marzo, y exigió a Fernández Mañueco que “dé la cara y diga si es aun el candidato”.
“Sigue en la tumbona, no se sabe si en este momento hay un candidato a la investidura”, recalcó Sánchez, que se refirió a los momentos de crisis que se viven y que el país funciona porque “hay un Gobierno estable que toma medidas”, en referencia a las anunciadas ayer por Pedro Sánchez.
A su vez criticó que el presidente en funciones no haya dado una respuesta al plan anticrisis planteado por el portavoz socialista, Luis Tudanca. “Esto está empezando a rallar la falta de respeto con esta tierra y su gente, los castellanos y leoneses no se merecen la desidia y pusilaminidad de un candidato que no sabemos si será o no será después de haber puesto en marcha todo el procedimiento”, insistió Sánchez.
Entrada de la ultra derecha
La vicepresidenta segunda de las Cortes, Ana Sánchez, se preguntó si “no queda nadie con sentido común en el PP” que impida que siga “arrodillándose” ante la extrema derecha. “A lo mejor alguien ha levantado la voz y ha dicho ¿dónde van en Castilla y León metiendo en las instituciones a la extrema derecha?”, insinuó la socialista Ana Sánchez.
La socialista se preguntó si en el Partido Popular, que un día fue partido de Estado y que defendía postulados liberales, queda alguien que pueda reflexionar e impedir que den entrada en el gobierno a la extrema derecha. “Están completamente arrodillados ante la extrema derecha y eso supone arrodillar los intereses de los castellanos y leoneses”, remachó. Ana Sánchez, quien aseguró que la situación ya roza “la falta de respeto”, aseguró que no pierde la esperanza de que quede “un poquito de sentido común en el PP” y se estén pensando, después de 40 años, meter a la extrema derecha.
