Es un clamor que tiene visos de hacerse realidad en poco tiempo. La fuerza de las mascaradas de invierno en Zamora exigen por parte de sus defensores la creación de una asociación provincial que defienda en conjunto esa riqueza patrimonial, antropológica, etnográfica y turística de primer orden. Son un bien que hay que proteger, incentivar e incrementar.

Esta propuesta se presentará el jueves 17 de febrero (19.30 horas) en el paraninfo del Colegio Universitario, dentro del foro del Club LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, que contará con varios expertos que explicarán la necesidad de crear esta asociación para remarcar la riqueza que atesoran estas tradiciones. Presentados por la directora del club, Carmen Ferreras, en la mesa de este jueves estarán José Javier Sánchez Hernández, presidente de la Asociación Amigos del Zangarrón de Sanzoles; Juan Francisco Blanco González, autor del libro “Los carochos. Rito y tradición en Aliste”; Celedonio Pérez, periodista de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, escritor y autor de “El zangarrón de Sanzoles. La historia del brujo que se convirtió en diablo bueno. Rito. Tradición y mito”; Pilar Panero García, profesora de Antropología de la Universidad de Valladolid; Felipe Carlos Fernández Miguel, impulsor de las mascaradas de Tierra del Pan y Óscar Coca del Estal, promotor de las mascaradas de Sanabria.

En las últimas décadas, con el fin de consolidar las mascaradas más arraigas y recuperar las que se habían perdido por falta de vecinos en las localidades donde se celebraban, se han hecho grandes esfuerzos —la mayor parte de ellos individuales, pero también otros apoyados por grupos locales, ayuntamientos, Diputación o Junta— que han logrado que Zamora sea la provincia del país con mayor número de celebraciones de este tipo, algunas incluso declaradas de interés turístico regional, como el Zangarrón de Sanzoles o los Carochos de Riofrío de Aliste.

Junto a la presentación de esta nueva asociación, en el Club LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA se debatirá y cambiarán impresiones sobre esta iniciativa que busca, entre otros objetivos, prestar apoyo a todas las mascaradas, recuperar este tipo de fiestas allí donde se hayan perdido, buscar fórmulas para que se puedan escenificar en los pueblos donde ya no quedan vecinos que puedan tomar el testigo de estas mascaradas y servir de interlocutores ante las instituciones. Sin olvidar que la despoblación está desmantelando el ámbito rural, sus gentes y sus costumbres y destruyendo una cultura inmensamente rica en elementos antropológicos. Por eso este colectivo quiere actuar antes de que sea demasiado tarde y gestionar los beneficios de la inminente declaración de Bien de Interés Cultural de las mascaradas.