Sabía que sería complicado superar el medio centenar de donaciones alcanzadas en la última campaña —la del curso 2019-2020— pero con la misma entrega organizó el colegio Santísima Trindad-Amor de Dios la jornada de donación de sangre que supone el punto final al proyecto de aprendizaje y servicio “Aprende, participa y dona”, una iniciativa educativa que este febrero cumple nada menos que cinco ediciones. “Nos hace especial ilusión organizarla este año, donde se puede volver a hacer donaciones de sangre”, reconoce el director pedagógico, Luis de Mena, ya que el COVID hizo que el pasado año descartaran esta actividad dentro del proyecto.

Desde el mes de septiembre están preparando las diferentes actividades todos los actores que participan. Desde el claustro de profesores hasta el ampa del colegio, la Asociación de Comerciantes de la Margen Izquierda del Duero (Acmid), la Hermandad de Donantes de Sangre de Zamora y la delegación de alumnos del centro.

Participantes en el proyecto, esperando para hacer su donación. Jose Luis Fernández

Se trata, además, de una iniciativa de carácter global, puesto que implica a todas las etapas del colegio, Infantil, Primaria y Secundaria, al igual que ocurre con otro de sus proyectos educativos estrella, el de Guardianes del Duero.

La sangre y todo lo que gira alrededor de ella es el motor de “Aprende, participa y dona”. En un primer estadio, el factor aprendizaje se basa en la investigación de los contenidos curriculares, donde los profesores programan tareas que facilitan la comprensión de determinados temas, en este caso, del sistema circulatorio. “Además, vinculamos todas las áreas. Así, en lengua se crea el certamen de relato corto sobre voluntariado y donación de sangre; en arte está en concurso de murales que se exponen en este día; en matemáticas se trabaja con los porcentajes de las donaciones y los grupos sanguíneos y en inglés se aprende vocabulario básico”, pone como ejemplos De Mena.

El director pedagógico del centro entrega algunos premios. Jose Luis Fernández

Pero, sin duda, la fase de difusión, que se centra en dar a conocer el servicio a toda la comunidad es la que más entusiasma a los alumnos. “Los estudiantes de 5º y 6º de Primaria y de 1º y 2º de la ESO son los encargados de explicar el proyecto tanto a los negocios del barrio como a los medios de comunicación y es un actividad muy atractiva para ellos, porque además supone trabajar fuera del aula”, justifica el director pedagógico, quien subraya que realizar tareas al aire libre es una de las señas de identidad del proyecto educativo del centro.

Una de las novedades de la edición de este año, aprovechando que el colegio está inmerso en un plan de formación de herramientas digitales, es la creación de nuevas rúbricas para evaluar las tareas. Además, la tecnología se ha “colado” también a través de páginas web donde presentar las investigaciones de los alumnos o incluso la creación de podcast de radio, posibilidad que surge porque el centro participa este curso en el proyecto de innovación educativa “Sintoniza”, de la Junta de Castilla y León.

Todas estas actividades tuvieron el colofón final en la jornada de ayer, donde el colegio Santísima Trinidad abrió sus puertas para que los vecinos de Pinilla pudieran acercarse a colaborar donando sangre y se repartieron los premios del concurso de relato corto, al que este año se había incluido una categoría de familia, para incrementar la participación y colaboración de los padres de los alumnos. Una jornada que agradeció especialmente la Hermandad de Donantes de Sangre de Zamora y que “enorgullece” al colegio al aportar su granito de arena en las donaciones.