A la vera de la N-122 en Coreses, del lado derecho en dirección Zamora, una construcción que puede pasar desapercibida porque parece un chalet, en realidad esconde en su interior el centro de radiocontrol de ENAIRE, el gestor de la navegación aérea en España. Desde allí se da apoyo cada día a cientos de aviones que salen de Europa hacia América, y viceversa, surcando el cielo zamorano.

Se trata del último vestigio de lo que fue un amplísimo aeródromo que existió junto a Coreses, una gran explanada hoy reconvertida en uno de los polígonos industriales más dinámicos de la provincia.

Esta reconversión no fue ni fácil ni rápida. Las primeras naves industriales se construyeron en los 90, pero el gran impulso llegó con la ampliación del polígono Campo de Aviación I, cuya historia se remonta al año 2004, cuando la Corporación Municipal, entonces presidida por Ángel Elías, decidió comenzar los trámites burocráticos y buscar financiación.

El proyecto planteaba convertir en suelo industrial una explanada de 240.000 metros cuadrados. El Plan E puesto en marcha por el Gobierno de España en noviembre de 2008 supuso un impulso económico para esta ambiciosa iniciativa. Coreses recibió fondos que, en colaboración con algunas empresas privadas, permitieron comenzar las obras para urbanizar todo la zona y convertirla en suelo industrial.

En marzo de 2011 el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, inauguraba la ampliación del polígono, con una superficie útil de más de 109.000 metros cuadrados.

Primeros años difíciles

Sin embargo, la inauguración coincidió con los años más crudos de la crisis económica, lo que complicó el desarrollo de “Campo de Aviación I”.

La subestación eléctrica que garantiza la suficiente potencia para atraer a más industrias no se pudo construir y conectar con el polígono hasta el año 2014. A partir de entonces, durante el mandato de Luis Hernández en la Alcaldía, se subastaron los primeros terrenos de la ampliación.

Posteriormente, ya con José Luis Salgado en en el Ayuntamiento, el número de empresas instaladas fue creciendo hasta la situación actual.

En una provincia eminentemente agroganadera como Zamora lo que más abunda en el polígono son las industrias relacionadas con la alimentación.

Una de ellas es Embutidos Paulino Iglesias. En su fábrica de Coreses elaboran chorizos y jamones de manera tradicional, además de lomo embuchado y carnes adobadas como chichas, costilla o panceta. Desde sus inicios en 1983 esta empresa no ha abandonado su forma de trabajar con materia prima de calidad y especias naturales, sin ningún añadido.

Poligono Industrial Campo de Aviación / El Roto Coreses