Zamora fue la provincia de la comunidad donde más se incrementaron las donaciones de sangre el año pasado, un 8,8%, hasta llegar a las 5.545, frente a las 5.096 del año precedente. Un balance muy positivo que se explica por la normalización de la actividad tras el descenso de 2020, año de confinamiento provocado por la pandemia del coronavirus.

Fueron los datos desgranados por el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre de Zamora, Jesús Murias, que presentó también el proyecto que desarrolla el Colegio Santísima Trinidad, el Amor de Dios de Pinilla, que llevará a cabo una colecta entre la comunidad educativa y los vecinos del barrio el próximo 1 de febrero entre las cuatro de la tarde y las nueve de la noche.

La mayor parte de las donaciones se recogieron en las colectas de los equipos móviles del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León, 3.341 extracciones, mientras en el punto fijo se realizaron 1.820. Además hubo 384 donaciones de plasma.

Murias indicó que “el trabajo que se está haciendo desde las Hermandades de Donantes en colaboración con el Centro de Hemoterapia, lo estamos haciendo bien”, como demuestra el incremento de las extracciones general de la comunidad y especialmente de Zamora, con un 8,8%. El trabajo en las redes sociales está siendo efectivo, indicó el presidente, además de la labor de los delegados de las comarcas.

Como suele suceder todos los años los meses de enero y noviembre son los más productivos.

Actividad del 1 de febrero

Antonio García Muñoz, director de la ESO en el colegio Amor de Dios de Pinilla explicó que la meta es superar las 50 donaciones de la anterior edición de la colecta, que forma parte de un proyecto de aprendizaje y servicio “Aprende, participa y dona”, que desarrolla la comunidad educativa del colegio, junto con la asociación de comerciantes de la Margen Izquierda y la Asociación de Vecinos de Pinilla.

Junto con dos alumnos, Rocío Romero, de tercero de la ESO y Daniel Tascón de quinto de primaria, Antonio García explicó que se trata de “consolidar al barrio de Pinilla como zona solidaria, pionera en la donación de sangre”. La experiencia llega a la cuarta edición. “No solo es un proyecto de donación, es un proyecto curricular, abarca todo el centro. La comunidad educativa desde el comienzo del segundo trimestre han estado trabajando curricularmente la sangre, el sistema circulatorio y todos los aspectos relacionados con ello”.

Además la actividad fomenta la solidaridad y permite a la comunidad educativa familiarizarse con la donación de sangre.

Murias explicó la importancia de contar con reservas de sangre suficientes para asegurar la atención sanitaria de la población, sobre todo en los hospitales.

Y señaló que la campaña de cine de Navidad va a finalizar con el entorno de las 600 entradas distribuidas que se corresponden con otras tantas donaciones, lo que ha resultado “muy positivo”.