Más de la mitad de la provincia de Zamora está catalogada como zona de interés para la defensa nacional porque constituye o puede constituir una base permanente de apoyo eficaz de las acciones ofensivas o defensivas necesarias para proteger el país.
Una de las consecuencias de esta declaración es que en estas áreas está limitado el acceso a la propiedad por parte de los extranjeros, que deben contar con la autorización del Ministerio de Defensa para ostentar la titularidad de viviendas e inmuebles. Una exigencia que últimamente se ha suavizado bastante, ya que desde julio del año pasado una de las causas que eliminan la necesidad de autorización militar es que los planes de urbanismo estén aprobados por el Ministerio de Defensa. Este ministerio considera informados favorablemente todos los planes de urbanismo de las poblaciones afectadas, por lo que ya no es necesario autorización militar en fincas urbanizadas, y sigue siendo necesaria en fincas rústicas, poblaciones fronterizas o Ceuta y Melilla.
Es precisamente la condición de provincia fronteriza con Portugal lo que convierte a buena parte de la provincia de Zamora en zona de interés para la defensa nacional, a pesar de que en su territorio no haya de momento ni una sola instalación militar. Está incluida la zona delimitada entre la frontera y la línea imaginaria León-Benavente-Zamora (por el trazado del tren Ruta de la Plata)-Ledesma.
