Uno de cada tres zamoranos positivo por el virus desde que la pandemia llegara estas tierras, en marzo de 2020, se ha contagiado en el último mes. Así de infecciosa está siendo esta sexta ola, responsable concretamente de un 37% de los contagios por coronavirus habidos desde siempre en el corto periodo de tiempo que va del 21 de diciembre de 2021 al 21 de enero de 2022. Durante estas cuatro semanas se han ido sucediendo los récords de contagios diarios hasta tal punto que el máximo histórico que había marcado el 1 de noviembre de 2020, cuando se detectaron 234 positivos en toda la provincia, se quedaba superado con facilidad, un día si y otro también. Empezó el mismo día de Nochebuena, cuando los centros de salud se llenaron de usuarios para hacerse pruebas que dieron como resultado 245 positivos.

Evolución de la pandemia, según los casos diarios, en Zamora provincia y capital L.O.Z.

Y a partir de ahí un suma y sigue, con jornadas como la del 31 de diciembre con 460 casos en un día, el 6 de enero con 567, el 8 de enero con 616, el 12 de enero 684 y el 14 de enero 738 casos, hasta el momento récord absoluto de contagios de la pandemia, con casi el triple de casos que las plusmarcas de las cinco olas anteriores. Pero sigue habiendo días con muchísimos contagios, sin ir más lejos esta misma semana con los 593 casos del 18 de enero o los 208 declarados el día 21.

La capital

En Zamora capital la tónica ha seguido más o menos los mismos cauces que el resto de la provincia. El récord absoluto lo tenía el 12 de noviembre de 2021 con 105 casos, pero llegó la sexta ola y se pulverizó hasta llegar al 11 de enero en el que se detectaron 265 casos solo en la capital.

En las residencias de mayores es más difícil la comparativa. Atendiendo al aparado de confirmados con COVID los infectados habrían subido de los 1.194 acumulados desde marzo de 2020 hasta el 21 de diciembre de 2021 hasta pasar a los 1.679 desde esa última fecha hasta un mes más tarde, el 21 de enero de 2022. Esto significa un 29% de incremento.

Fallecidos

Tanto caso tenía que dejar muchos pacientes graves y fallecidos, por mucho que la mayoría de los infectados tenga pocos o ningún síntoma. Efectivamente, ha sido así, pero seguramente por la extensión de la vacunación las consecuencias de tanto contagio han sido menos graves.

Así, en el último mes en el hospital han fallecido 14 personas, que son solamente el 3% de los 471 muertos hasta el momento en el Virgen de la Concha. Cierto es que ha habido jornadas con tres y hasta cuatro fallecidos, algo muy preocupante, pero en datos globales todavía se puede considerar a esta sexta ola menos mortífera que las anteriores. En las residencias han fallecido seis personas, algunas de las cuales son las mismas que se contabilizan el día anterior como muertes en el hospital.

Algo parecido pasa con las hospitalizaciones. El 4 de noviembre de 2020 el hospital llegó a tener 153 ingresados por coronavirus y el 1 de febrero de 2021 141, mientras que ahora con muchos más casos el máximo se ha alcanzado el 11 de enero, con 57, casi la tercera parte. Lo mismo ocurre con los pacientes en la UCI, que llegaron a ser 15 sólo con patología COVID el 13 de febrero de 2021, mientras que en esta sexta ola no han pasado nunca de cinco e incluso ahora mismo solo hay uno.

Uno de los aspectos más preocupantes de esta sexta ola es que a pesar de que la curva de incidencia parece que puede empezar a bajar, el alto número de casos diarios no permite asegurar que estamos en la cuesta abajo de la sexta ola y por tanto nadie sabe aún cuánto se puede prolongar, máxime cuando se ha optado por evitar tomar medidas restrictivas.

Cierto es que la vacunación es el elemento diferenciador de esta ola. El 1 de febrero pasado había apenas diez mil zamoranos con una dosis y tres mil con las dos. Hoy hay 145.505 zamoranos con dos dosis y 91.926 con tres.

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