Una vivienda de la calle de la Salud, en el barrio de San José Obrero, que dispone de cuatro ventanas a la altura de la calle tiene nada menos que cuatro contenedores, uno frente a cada hueco. La dueña del inmueble dice que los contenedores se colocaron el lunes y la justificación fue que se movían por las obras que realizaba la empresa Aquona para meter una tubería.
Sin embargo, la instalación provisional, que era para tres días, se ha prolongado durante toda la semana y llegado el sábado, dado que no parecía que los contenedores se fueran a cambiar de ubicación, la propietaria de la vivienda ha optado por ir a denunciar los hechos a la Policía Municipal. Los agentes le han prometido ponerse en contacto con Zamora Limpia por ver de resolver la situación.
"Son tres contenedores de basura doméstica y uno de papel, que no se puede ni cerrar. Llevo toda la semana sin poder abrir la ventana", se queja la afectada.
La ubicación de contenedores es un asunto no exento de polémica, ya que nadie quiere tenerlos cerca de casa. Y existen, claro, estos casos extremos como el de la vivienda de la calle de la Salud. Pero también otros, como los contenedores ubicados en la calle Pablo Morillo "que no cierran bien y están situados enfrente de unos locales de alimentación", como bares, pescaderías y carnicerías.
El caso es que, se quejan establecimientos de la zona, "nosotros hemos de tener en el interior del local las basuras con cubo de tapa y pedal. Y los productos de alimentación separados, como es lógico, del resto de las basuras". Sin embargo, "en la misma puerta nos encontramos con todo tipo de desperdicios".
Vecinos y establecimientos de la zona están recogiendo firmas para presentar ante el Ayuntamiento, con el fin de que estudie una ubicación más adecuada para los contendores.
