El equipo de Gobierno de la Diputación de Zamora cumplió con el trámite y aprobó este viernes el presupuesto provincial para el ejercicio 2022. De poco sirvieron el rechazo y los argumentos de la oposición, que criticó especialmente la elevada cifra de inversiones prevista en la capital, el único municipio de la provincia que escapa del radio de La Encarnación. Contra esa acometida, el bipartito defendió su proyecto, plantó su mayoría y sumó el respaldo del miembro no adscrito del Pleno, un Tomás del Bien que se sitúa, desde hace tiempo, mucho más cerca de las posiciones del presidente, Francisco José Requejo, que de la de sus antiguos compañeros del PSOE.
Con este escenario, el punto principal de la sesión ordinaria de enero del Pleno de la Diputación se resolvió sin sorpresas, aunque la votación se demoró casi dos horas, lo que duró el debate entre los grupos. Los portavoces se extendieron en sus respuestas y Requejo contribuyó a estirar la discusión con una amplia alocución fuera de turno que sirvió para ponerle el broche a la posición del equipo de Gobierno sobre el presupuesto.
Antes, Requejo tuvo que enfrentarse al “no” rotundo de la oposición a un presupuesto que él mismo había definido como “el mejor de la historia de la institución”. Desde luego, no parece que la portavoz de Izquierda Unida, Laura Rivera, opine lo mismo, a juzgar por sus intervenciones. La representante de la oposición presentó una amplia argumentación y una nutrida batería de enmiendas ante el Pleno, aunque vio cómo el bipartito iba tumbando cada una de sus propuestas.
Las críticas
Consciente de cuál iba a ser la respuesta a priori, Rivera utilizó sus intervenciones para dejar clara su posición y para reseñar que el incremento de casi diez millones en el montante total del presupuesto del ejercicio, que alcanza este año los 75 millones de euros, procede del incremento de los ingresos procedentes del Estado.
Por lo demás, Rivera lamentó el descenso de los ingresos por la vía de los impuestos, “y no porque el equipo de Gobierno haya bajado tasas como el IAE, sino porque la provincia pierde población”. La responsable de IU también consideró que la atención a los ayuntamientos “no es una prioridad” para el bipartito y cargó contra las citadas inversiones en la ciudad, al considerarlas “interesadas” desde la óptica electoral.
Tampoco pareció especialmente satisfecho con la propuesta el portavoz del PSOE, Eduardo Folgado, que se mostró muy crítico con el proyecto presentado por el equipo de Gobierno, y que calificó el presupuesto de “malo en las formas y en el fondo”.
Folgado recordó que el bipartito no había citado previamente al Consejo de Alcaldes para presentarle el presupuesto y auguró numerosas modificaciones con el paso de los meses: “Esto que nos traen es algo ficticio, un mero trámite”, aseguró el dirigente del PSOE, que alertó sobre la posibilidad de que los cambios futuros en el documento traigan un reparto “arbitrario” del dinero.
La respuesta
La respuesta del equipo de Gobierno llegó de la mano de su portavoz, José María Barrios, que citó iniciativas como la del polígono de San Cristóbal o el Puerta de Noroeste de Benavente, y que defendió en líneas generales la propuesta “inversora” del bipartito: “Son acciones centradas en las personas del medio rural y que pretenden mejorar la vida de los pueblos”, aseveró el político moralino, que acusó a PSOE e IU de “estar desconectados de la realidad”.
Barrios reivindicó la inversión en carreteras y en obras, subrayó la justicia en el reparto sin mirar colores políticos, elogió los avances en turismo y remarcó la pertinencia de las partidas: “Nuestra hoja de ruta está clara, y nada ni nadie nos va a desviar”, argumentó el representante popular, que aceptó la discrepancia de la oposición como parte del juego partidista.
El último diputado en tomar la palabra fue el presidente de la institución, que habló de un presupuesto “con propuestas reales” y que reclamó sin éxito el voto favorable de la oposición. Como es costumbre en La Encarnación, el tono fue más relajado con Rivera que con Folgado, a quien Requejo acusó de buscar “un protagonismo patético”.
El dirigente liberal también hizo un repaso de las inversiones previstas, pidió dejar al margen las cuestiones partidistas y confirmó que el equipo de Gobierno “intenta trabajar con rigurosidad sin caer en la autocomplacencia”. “Estamos muy orgullosos y nos iremos con la cabeza alta cuando nos toque”, zanjó Requejo. Sus palabras dieron paso a una votación que abre la vía a la futura entrada en vigor de la propuesta del bipartito.
El bipartito formado por el Partido Popular y Ciudadanos aprobó este viernes el presupuesto de la Diputación Provincial para 2022. Los trece miembros del equipo de Gobierno aprovecharon su mayoría para esquivar el “no” de la oposición, y sumaron a la causa al representante no adscrito, Tomás del Bien, que votó a favor de la propuesta. Los dirigentes de La Encarnación justificaron su planteamiento, reivindicaron la inversión y recordaron que ese capítulo sumará nuevas partidas gracias a la incorporación de remanentes. Por su parte, Izquierda Unida y PSOE se posicionaron claramente en contra y coincidieron en criticar la elevada cantidad de proyectos previstos en la capital en lugar de en las comarcas.
Requejo, a Folgado: “Dudo mucho que usted sepa dónde está Barcial del Barco”
El presidente de la Diputación Provincial, Francisco José Requejo, se mostró visiblemente molesto ante la moción presentada en el Pleno por el PSOE sobre la biorrefinería de Barcial del Barco. El grupo de la oposición reclamó la comparecencia del dirigente liberal para que informe sobre la situación actual de la cesión de los terrenos y sembró unas dudas que provocaron la reacción airada del máximo mandatario de la institución. El receptor de los ataques fue el portavoz socialista, Eduardo Folgado, que previamente había defendido la moción: “Dudo mucho que usted sepa dónde está Barcial del Barco”, le espetó el presidente al responsable socialista, después de iniciar su intervención con otro golpe hacia su rival político: “Hace tiempo que perdió la credibilidad, no pierda el sentido del ridículo”. Requejo consideró la moción planteada por el PSOE como una acción “torticera y deleznable”. “Si alguien ha apoyado el proyecto ha sido este equipo de Gobierno. Ustedes han tenido tiempo para tomar iniciativas, pero ni quieren ni saben. Estamos trabajando en la cesión, y así lo saben los promotores”, insistió el presidente provincial. “Nosotros hemos sido meros facilitadores y en eso seguimos trabajando. La semana pasada estuvimos en contacto con los promotores y el resto es enredar por enredar”, zanjó Requejo.
PP y Ciudadanos reclaman el cese de Alberto Garzón
El bipartito formado por el Partido Popular y Ciudadanos aprobó una moción en el Pleno para “exigir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la rectificación inmediata de las declaraciones que realizó Alberto Garzón” en The Guardian y para reclamar el cese del responsable de Consumo del Ejecutivo “por sus reiterados ataques a uno de los sectores más pujantes del país y de la provincia de Zamora, como es el cárnico, que lleva años mejorando sus procesos para garantizar la más alta calidad alimentaria y el bienestar animal”. Por otro lado, el texto de la moción incluía también una petición al ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Planas, presente ayer y anteayer en la provincia, para que ponga en marcha una campaña nacional e internacional de defensa y apoyo al sector ganadero cárnico y para que impulse las medidas necesarias para la sostenibilidad del sector. La mayoría del bipartito venció de nuevo el rechazo de la oposición.
