La provincia de Zamora, actualmente dotada con la línea regional convencional Medina del Campo a Zamora y Zamora hacia Puebla de Sanabria y Orense, sufrirá un “efecto muy negativo” con el Plan ferroviario que prevé el Ministerio de Transporte, ya que “se ven comprometidas las necesarias inversiones para modernizar y mantener esta línea, imprescindible para el movimiento de mercancías y para dar una necesaria cobertura a los pueblos y comarcas que atraviesa”, expone la Asociación Ferroviaria Zamorana (AFZ). La organización se suma a las alegaciones presentadas por la coordinadora estatal ferroviaria para conservar este servicio, para contribuir a vertebrar el territorio de forma transversal, una carencias de este Plan.

Las alegaciones ponen de relieve que España precisa de una Red básica ferroviaria “mallada, extensa, coherente, consistente, accesible y con prestación de servicios de transporte ferroviario asequibles para todas las personas”. Se señala que un plan ferroviario ha de contemplar la inserción del tren en el sistema multimodal de transporte y situarlo en relación estrecha con la marcha a pie y los desplazamientos en bicicleta, ya que los modos peatonal, ciclista y ferroviario son los tres más ecológicos y sostenibles.

El tren regional, declarado como Obligación de Servicio Público, debería, incluso ampliarse en cuanto a horarios, con nuevas frecuencias y relaciones que faciliten la comunicación entre pueblos y ciudades, agrega la AFZ. Los integrantes de la Asociación reclaman, incluso, que se dé cobertura a pueblos que se encuentran más allá de Puebla de Sanabria y con Orense, desaparecida desde el año 2013. Una decisión que beneficiaría a localidades como Pedralba de la Pradería, Requejo, Lubián, “y a otros pueblos cercanos que no pueden aprovechar esa potencial ventaja de tener un trazado ferroviario en su territorio”.

LOZ La Asociación Ferroviaria de Zamora reclama el Ruta de la Plata.

Lograda ya la Alta Velocidad entre Madrid-Zamora-Galicia, la Asociación apunta a aprovechar el ferrocarril convencional prácticamente vacío, “con un tráfico ferroviario muy reducido, (el Regional Valladolid-Puebla de Sanabria, y algún tren de mercancías de paso), que se presenta como una auténtica oportunidad para potenciar un medio de transporte público, social, ecológico, sostenible, que comunique los pueblos y que ayude a paliar uno de los graves problemas de la España vaciada”. La Asociación insta al Ministerio a “apostar por el ferrocarril convencional y defender un modelo que es necesario, a no permitir que, ni por un momento, se pueda plantear su desaparición”.

Esa iniciativa encaja a la perfección con la agenda 2030 de la Unión Europea para la España Vaciada, una agenda contra la que choca frontalmente la propuesta del Plan Ferroviario del Ministerio de Transportes con la implantación de un sistema a la demanda para facilitar el traslado de viajeros en otros medios diferentes, a través de vehículos compartidos, como sería el caso de Zamora. Esta medida supondría cargarse de un plumazo los servicios por tren catalogados como de Obligación de Servicio Público (OSP), como el caso del tren regional, que ya estuvo a punto de cerrarse en 2013, explican desde la Asociación Ferroviaria Zamorana.

Para darle una mayor rentabilidad, los usuarios proponen que se adecúe el número de coches a la demanda real diaria.

Reivindicación

En el apartado de “Desarrollo de nuevas líneas”, las alegaciones señalan la importancia de reabrir líneas cerradas como la Ruta de la Plata entre Astorga y Plasencia, la línea transversal Valladolid-Ariza que conecta el Este y el Oeste de la Península en su mitad septentrional, entre otros tramos. La electrificación supondría una contaminación menor y esta línea contribuiría a esa vertebración del país.