El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zamora, Juan Prieto Corpas, reconoce que los boticarios tendrán que vender el stock de test de antígenos “a pérdidas” después de la regulación del precio de venta a 2,94 euros decidida por el Gobierno y que entra hoy en vigor. No obstante, asegura que lo prioritario ahora mismo es la salud de los ciudadanos y la disponibilidad de los test es fundamental para ayudar a controlar la pandemia, esfuerzo en el que “los farmacéuticos siempre hemos estado implicados”.
Prieto Corpas explicó que dos semanas antes de Navidad se dio un crecimiento de la demanda. Aunque nunca hubo desabastecimiento, los test que llegaban no eran suficientes para atender la demanda, lo que propició la aparición en el mercado de actores oportunistas que proporcionaron los test pero a un precio muy superior al habitual. Las farmacias tenían que atender la demanda y fueron las primeras que sufrieron el encarecimiento de los precios. “Es en ese momento cuando el Gobierno tenía que haber puesto un precio máximo” cree Corpas.
Ahora mismo se están restableciendo los canales habituales a precios más moderados y todo tenderá a regularizarse, aunque los stocks adquiridos antes seguramente tengan salida a pérdidas. “En España no hace falta vender test en los supermercados porque la red de farmacias llega a toda la población”.
