La diócesis de Zamora inicia el año con el estreno de una nueva imagen institucional más moderna. En ella el primer obispo y patrón de la diócesis, San Atilano, ocupa un lugar predominante, rodeado de los colores rojo y verde, alusivos a la capital, y también el rojo, representativo de la fe, mientras que el verde “simboliza las raíces con esperanza en la que crece la iglesia diocesana, en clara alusión al año jubilar en el que se encuentra inmersa la diócesis”, explica la entidad eclesial en su web. La propuesta, desarrollada por Estudio Piorno, está inspirada en una pieza del artista zamorano Antonio Pedrero, mientras que el arco de medio punto en el que se cobija pretende ser una alusión al arte románico característico de Zamora.