La belleza humana, la naturaleza así como los animales y la noche protagonizan la veintena de obras que integran la exposición “Bajo las sombras de la serenidad” que ha abierto sus puertas hasta 10 de febrero en el centro sociocultural Peromato.

En primer plano una de las imágenes de Gorret. | J.L.F.

La propuesta artística de Marta Hernández Heras y del italiano José Ramón Gorret, que reivindica la libertad del artista, la exaltación de las emociones y de los sentimientos, se gestó durante los meses de confinamiento. “Somos amigos y durante el tiempo que estuvimos sin poder salir de casa surgió la posibilidad de hacer un proyecto juntos” explica Marta Hernández. En su caso la creadora comenzó a realizar ilustraciones inspirándose en la naturaleza, los viajes, distintos estilos musicales e incluso la época renacentista y el prerrafaelismo. Una de las dificultades que tuvo que capear fue la escasez de materiales. Como no podía salir a adquirir más materias optó por emplear aquello que tenía más a mano. Así hasta utilizó la tinta de tatuaje que emplea en su trabajo como tatuadora. “Cada tinta es muy diferente y la tinta de tatuaje es muy densa, se asemeja mucho a la acuarela y el acrílico por lo que lo mezclé con mucha agua” describe la vallisoletana, que ha ilustrado varios libros y discos, y que para este proyecto ha apostado principalmente por técnicas mixtas en unos dibujos en los que junto a la naturaleza también planea la muerte.

La estancia domiciliaria retrasó la realización del trabajo por parte de José Ramón Gorret, un fotógrafo que comenzó a los 20 años a desarrollar su pasión y que para esta colaboración se ha inspirado en las obras de grandes pintores como John William Waterhouse, en Caravaggio y John Everett Millais, en la música grunge o en los paisajes que rodean su día a día en el norte de Italia, en Bressanone, para retratar a modelos y animales en la naturaleza.