La desaparición de los Fondos Europeos de Ayuda a los Más Desfavorecidos (FEAD) en un futuro próximo dará paso a la adquisición de tarjetas monedero para las familias más necesitadas que hasta la fecha se benefician de esas subvenciones en forma de alimentos de la UE. Al menos esa es la propuesta que se proyecta desde el Gobierno de España, pero a la que los bancos de alimentos se oponen con todas sus fuerzas. También la delegación de la ONG en Zamora, cuyo presidente, Andrés Rincón, señala que este cambio terminará con la esencia del banco de alimentos. “Estamos totalmente en desacuerdo con este cambio. Hay otras agrupaciones, como por ejemplo Cáritas, que sí que optan por esa vía de las tarjetas monedero, con diferentes cantidades, para canjearlas por alimentos en los supermercados, pero nosotros no vamos a unirnos”, subrayó Rincón, uniéndose así al sentir común de todos los bancos de alimentos del país, que ven cómo esa medida cambiaría su forma de trabajar.

En la actualidad, el Banco de Alimentos de Zamora ayuda a 3.200 personas, una cifra que se ha incrementado con la pandemia en los últimos meses, según reconoció el presidente de la ONG. “Estamos haciendo todo lo posible para seguir ayudando de la misma manera”, aseguró, aunque las circunstancias actuales parecen ponerse en su contra, comenzando por los fondos europeos, que se reducirán en periodicidad una vez más este año 2022. “Hace tiempo eran cuatro partidas, una por cada trimestre del año”, recordó Rincón, “pero luego se redujeron a tres y ahora serán solo dos partidas en el año”, explicó. Una medida que se mantendrá también en 2023, antes de la desaparición de los fondos para ser sustituidos, previsiblemente, por las mencionadas tarjetas monedero. Esta reducción provoca una disminución en la variedad de productos, “manteniendo básicos como aceite, galletas o leche”, puso como ejemplos el presidente de Zamora, quien añadió que en la provincia las reservas están garantizadas, con 50 toneladas de producto almacenado.

Una voluntaria trabaja en el Banco de Alimentos. Cedida

Un fondo de 26.000 euros fruto de la generosidad que asegura el abastecimiento

El presidente del Banco de Alimentos de Zamora, Andrés Rincón, agradece la generosidad de los ciudadanos durante la última campaña de la Gran Recogida de Alimentos, que ayudó a recaudar un total de 26.000 euros en la provincia. Una cantidad que da bastante tranquilidad a la delegación local de la ONG a la espera de la llegada de los productos procedentes de los fondos de Europa durante el segundo trimestre del año. “Lo que hemos notado es que con otros problemas como los afectados del volcán de La Palma, la gente se volcó en nuevas necesidades pero, aun así, el dinero que recaudamos en la Gran Recogida, unido a lo que la gente ha donado en estos días de Navidad, nos da un colchón para afrontar estos primeros meses del año”, apuntó Rincón, quien señaló que el descenso de donativos también se ha dejado notar en el menor número de festejos que se han celebrado en estos meses con motivo de la pandemia. “Antes aprovechaban las fiestas patronales, por ejemplo, para recaudar fondos con diferentes actividades a favor del Banco de Alimentos”, justificó el presidente, quien señaló que “en estos tiempos, más que nunca, hay que ser previsores”.