En medio de la tormenta por la paralización de los trabajos de la biorrefinería multifuncional de Barcial del Barco, el presidente de la Diputación de Zamora, Francisco José Requejo, abogó por templar los ánimos y reclamó “diálogo” para sacar adelante un proyecto que, en estos momentos se encuentra encallado. La semana pasada, los promotores anunciaron que el asunto estaba en manos de “abogados penalistas” y la plataforma que respalda la iniciativa empresarial habló de presuntas injerencias y de un supuesto “boicot” de la Junta de Castilla y León.

Con este contexto como telón de fondo, Requejo contactó este lunes con los promotores y les expresó su inquietud. Hay que recordar que la Diputación de Zamora se ha implicado en el proyecto hasta el punto de adquirir los terrenos por un valor de 307.000 euros, una inversión que, en principio, la institución recuperará ocurra lo que ocurra, pero que deja patente el nivel de compromiso del presidente provincial con la causa.

El propio dirigente liberal puso sobre la mesa si la cesión de esos terrenos debía seguir adelante o si la situación invitaba a frenar ese acuerdo y a dar marcha atrás a todo el proceso. Según Requejo, la respuesta de los promotores fue en la línea de continuar, por lo que la Diputación mantendrá el compromiso adquirido.

Mientras, el presidente provincial espera que el conflicto que parece haber entre los impulsores de la iniciativa empresarial y la Junta se resuelva de forma satisfactoria. Requejo reveló que los promotores le han solicitado una reunión al área liderada por el vicepresidente autonómico, Francisco Igea, y que se encuentran a la espera de respuesta: “Esperemos que todas las partes lleguen a un acuerdo, que es lo que buscamos”, insistió el responsable zamorano.

Para Requejo, el proyecto de la biorrefinería “es bueno para la provincia”. De ahí que él mismo se haya implicado “en primera persona” para tratar de darle el empuje que le había faltado años atrás: “No queremos que esto se paralice y lo vamos a seguir defendiendo”, remarcó el presidente de la Diputación, que pidió “sensibilidad” a las partes implicadas y apostó por que “impere el sentido común”.

En esa línea, el mandatario de Ciudadanos incidió en “la cantidad de puestos de trabajo directos e indirectos” que podría generar la biorrefinería de Barcial del Barco y puso el foco en la importancia de estos proyectos empresariales para el desarrollo de la provincia: “Yo quiero ser optimista y pensar que se va a llegar a un acuerdo”, aclaró el propio Requejo.

En todo caso, la participación de Requejo y su equipo en la causa va a llegar hasta ahí: “Ahora, son ellos los que tienen que solucionar el problema”, insistió el responsable autonómico, que sí reconoció que los promotores le han transmitido la existencia de “alguna cosa turbia” entre las causas de la paralización de la obra.

“Yo considero que tienen que hablar las partes sobre los intereses que hay, pero deben primar el sentido común y la coherencia”, zanjó Requejo, sin querer entrar en más detalles. Lo que sí quedó muy claro durante la intervención del presidente provincial es que la institución mantiene el compromiso adquirido para la cesión de los terrenos, pero que no se responsabiliza de los problemas que puedan surgir más allá de eso.