Salvar de pintadas y grafitis a los monumentos catalogados, como las iglesias románicas y la muralla, liberar de ese “vandalismo” al casco histórico y los barrios de la capital está detrás de la propuesta del grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Zamora de un Plan de Actuación para erradicar el deterioro del casco urbano de Zamora. Entre ellas, la creación de una junta local de seguridad para abordarla la problemática “de manera coordinada con administraciones con responsabilidad en la materia” e intensificar la vigilancia y control con la creación de un grupo trabajo en la Policía Municipal.

Localización de las pintadas elaborada por el PSOE:

Para esa “regeneración urbana y conservación de edificios y monumentos” que urgen los concejales socialistas acaban de presentar un visor que localiza ya más de 500 inmuebles de la capital, tras “un trabajo intenso de dos años”. Pintadas diseminadas, esencialmente, por el casco histórico y por barrios próximos, afectados por lo que amenaza con “convertirse en un mal endémico de la ciudad”, declaraba ayer el portavoz del grupo municipal del PSOE, David Gago.

Los ediles socialistas proponen ofrecer una especial atención a las zonas y monumentos más afectados por las pintadas, que se dispersan por la capital como detalla el trabajo de campo presentado ayer y que confían en que sirva para emprender acciones desde el Ayuntamiento. El grupo municipal del PSOE responsabilizó al Ayuntamiento de no poner remedio al avance de estos actos vandálicos y propuso este plan de actuación para atajar el deterioro que implican para la ciudad, que “afean y estropean las fachadas y monumentos”, una intervención integral contra estos comportamientos que partiría de un diagnóstico sobre el grado de afectación en la capital.

El PSOE ha parcelado en tres zonas la capital, que comprende una primera, el casco antiguo, que comprende desde la plaza de Viriato hasta la Catedral; una segunda, que incluye los barrios de Olivares, La Horta y Santa Lucía y La Lana; y una tercera, que parte de la plaza de Viriato y recorre la avenida de Alfonso IX, y las calles de San Torcuato, Santa Clara y San Andrés.

Convenios con particulares

Otra de las medidas pasa por intensificar la limpieza desde la institución local, con partidas concretas y ajustadas al presupuesto de la retirada de las pintadas, muy costosa desde el punto de vista económico. Sin olvidar la ayuda a los vecinos para que puedan afrontar los gastos de contratación de empresas especializadas en retirar grafitis.

En esa línea de actuación, los concejales socialistas instan al equipo de Gobierno municipal de IU a establecer convenios con los propietarios de los edificios afectados para efectuar esas tareas de saneamiento de fachadas y “erradicar este mal”, apuntó el portavoz socialista, David Gago. Hizo especial hincapié en la mala imagen que se ofrece a los turistas “que vienen a apreciar nuestros monumentos y se encuentran con pintadas en el patrimonio patrimonio cultural y artístico”.

Detrás de la preocupación de los socialistas está la creación del geolocalizador de los grafitis y pintadas sobre monumentos BIC y fachadas de edificios de la capital, una herramienta, “un mapa virtual que se debería de actualizarse continuamente”, fundamental para desarrollar esa estrategia de combatir el vandalismo que tanto degrada la imagen de Zamora.

Pero no solo se trata de intensificar el control, sino también de educar, de establecer programas para que los más pequeños puedan conocer y valorar la riqueza monumental de la capital, una concienciación que repercutirá en el respeto al patrimonio histórico y cultural de la capital zamorana.