Los momentos que viven los hermanos de la Penitente Hermandad de Jesús Yacente en la iglesia de Santa María La Nueva antes de iniciar su recorrido procesional o detalles de la imagen de Francisco Fermín pueden contemplarse desde ayer en 24 escaparates de negocios situados en algunas de las calles más comerciales de la ciudad.
Las instantáneas, tanto en blanco y negro como en color tomadas por el fotógrafo Miguel Ángel Valdivieso, reflejan que “la hermandad está viva y permanece a lo largo de todo el año”. La muestra, bautizada con el nombre de “Volveremos”, es “la gran esperanza que todo tenemos para que la próxima Semana Santa podamos volver a salir a las calles de Zamora con nuestra imagen a demostrar que somos un pueblo de Dios que camina en la vida potenciando nuestro amor y fe en Cristo”, explicó ayer el hermano mayor (presidente) Dionisio Alba. El semanasantero desgranó que la hermandad ha querido efectuar la actividad para que “todos los zamoranos nos recuerden y tengan presente cuando desfilábamos, pues, por culpa de la pandemia, llevamos dos años sin poder demostrar nuestra fe en las calles de Zamora”. También aludió a que noviembre “es el mes por excelencia de los difuntos” y por ello desde la hermandad quieren “recordar a todos los hermanos que han fallecido por la pandemia y a aquellos que han muerto y que han integrado nuestras filas”.
Además, la Penitente Hermandad de Jesús Yacente inicia hoy, por primera vez, un triduo en honor del Cristo Yacente en el templo de Santa María La Nueva a partir de las 20.30 horas.
En otro orden de cosas, el Yacente ha organizado su II jornada de convivencia micológica para este domingo, día 14. En la actividad los asistentes realizarán una visita guiada al museo micológico de Rabanales, también llevarán a cabo una salida al campo para recolectar diversas especies micológicas para luego clasificarlas o visitarán Sejas, en cuya parroquia tienen previsto celebrar una eucaristía.
Las hermandades y cofradías retornan, poco a poco, a la vida social de los zamoranos después de que la Semana Santa acumule ya dos años seguidos de suspensiones debido a la pandemia. A partir del año que viene las cofradías entrarán en su habitual ajetreo informativo centradas ya en la celebración de la Pasión. Una celebración que el año que viene, si nada se tuerce, volverá a las calles de Zamora.
