Desde el famoso musical de “La llamada” hasta un improvisado concierto de El Niño de Elche, los zamoranos pudieron disfrutar ayer de una apretada agenda cultural en la que participaron los dos teatro de la capital y el Museo Etnográfico de Castilla y León.

El musical “La llamada”, en el Ramos Carrión. | J. L. Fernández

Allí precisamente se celebraba la segunda sesión de las I Jornadas Termus, bajo el lema de “Trasteadores”, con la participación de Corazón Gallardo con sus jotas, Raúl Rodríguez y El Niño de Elche, que impartió una charla regada con algunas canciones que retumbaron en el salón de actos del museo.

Un momento de “La realidad”, en el Principal. | Emilio Fraile

“La llamada”, uno de los musicales más famosos de los últimos tiempos —idea original de Los Javis— llenó el Teatro Ramos Carrión, mientras que en el Principal se pudo ver “La realidad”.

El Niño de Elche, de concierto en el Museo Etnográfico. | J. Luis Fernández B. B. G.

También hubo tiempo para el arte en forma de pintura, con la nueva exposición que ofrece Ángel Almeida en su galería de arte Espacio 36. Esta vez por partida doble, ya que se unen obras de dos artistas, López Herrera y Alfonso Cuñado, con sus diferentes miradas de la realidad. Esta muestra se podrá visitar hasta el 8 de noviembre, en horario de lunes a sábado, de 12.00 a 14.00 horas y de 18.00 a 21.30 horas.

Un momento de la comida de la Cofradía del Cristo de Valderrey, con la reunión de hermanos. | Jose Luis Fernández

Por último, la Cofradía del Cristo de Valderrey celebró ayer en su ermita la tradicional misa por los hermanos difuntos. En este año se recordó a once fallecidos: Antonio Martín Cabañas, José Lorenzo García, Tomás Cubillo Vázquez, Vicente González Martín, Mariano Tejero González, Antonio Cordero Martín, Conrado Eguaras Blanco, Felipe Mayado Iglesias, Ángel Gavilán Arganda, José Nafría Ramos y Carlos Ramos Mediavilla.

Tras la eucaristía, los asistentes pasaron al comedor de la ermita junto con sus acompañante para disfrutar de una velada gastronómica de cocido castellano, ideal para soportar estos primeros días de frío zamorano.