“Harán falta guarderías, vivienda subvencionada, una buena red de transporte...”. Son tres ejemplos, pero seguramente hay más. El diputado del PSOE Antidio Fagúndez apuntó ayer a las necesidades que generará en Toro, Zamora y Fresno de la Ribera, fundamentalmente, la puesta en servicio de las instalaciones militares de Monte la Reina, cuyos trabajos de rehabilitación comenzarán en los próximos meses debido a la partida presupuestaria, de veinte millones de euros, que el Gobierno destinará a este proyecto en los próximos Presupuestos Generales del Estado —si salen, claro está, adelante en el Congreso—.
Fagúndez, y con él el Gobierno, miran al resto de administraciones públicas en esta tarea. Fundamentalmente a dos: Diputación y Junta de Castilla y León. El diputado socialista reconoció que, en otros puntos de España, se han llevado a cabo proyectos similares que, en su búsqueda de fijar población, no han resultado satisfactorios. “Una vez que el Gobierno ha dejado claro que Monte la Reina va a ser una realidad llega el turno del resto de instituciones, que se han ofrecido a colaborar, para que destinen partidas presupuestarias para mejorar los servicios públicos” y que los cientos de familias que, se supone, llegarán a Zamora, se queden.
El diputado socialista aseguró que el hecho de que vaya a ser el Ministerio de Defensa el que corra con la inversión “íntegra” no conlleva que “el resto de administraciones no tenga que colaborar”. El PSOE, que desde hace meses había defendido la cofinanciación del proyecto entre todas las administraciones zamoranas y ahora subraya que el pago de las obras vaya a recaer íntegramente en el Gobierno, afeó por boca de Fagúndez la actuación de otras instituciones. “Cuando Juan Vicente Herrera era presidente dijo que la Junta cofinanciaría el proyecto y, cuando hubo que tomar una decisión, la Junta se desdijo y apuntó que la inversión era competencia exclusiva del Estado. Solo al final, cuando algunos creían que las obras nunca iban a empezar, se ha puesto sobre la mesa dinero. Pedimos que esas partidas sean utilizadas para servicios complementarios”, apuntó Fagúndez en declaraciones a los medios de comunicación. En el plano más político, el diputado repitió las críticas al PP: “Cuando triunfó la moción de censura Monte la Reina estaba en venta. La Diputación quería comprar el terrero para destinarlo a la caza y al ocio. No se hablaba ni mucho menos de esta inversión. Me alegro de que ahora estemos todos de acuerdo, pero pido que colaboremos”, concluyó el diputado en este aspecto.
Colaboración con la USAL
Por lo demás, Antidio Fagúndez abrió la puerta a implicar a la Universidad de Salamanca en el desarrollo futuro del campamento de Monte la Reina mediante los estudios que ya a día de hoy se imparten en el Campus Viriato. Según avanzó el diputado del PSOE, el Gobierno trabaja con la USAL para tener convenios y que “Monte la Reina, que va a ser pionero en el mundo digital, pueda desarrollarse”. Fagúndez aclaró que, en cualquier caso, no se pretende de momento la búsqueda de nuevas titulaciones para el Campus Viriato. “Las que hay ahora son compatibles con la investigación y con el desarrollo”. El Gobierno y la USAL trabajan en un documento que, según el diputado, se conocerá “en los próximos meses”.
